Las empresas deberán repensar el enfoque de compensación total hacia uno que alinée la compensación no monetaria con las preferencias y necesidades de los colaboradores.
Es necesario que indaguen y comprendan las preferencias a nivel individual en lugar de ofrecer una diversidad de alternativas, poniendo foco en la “persona en su totalidad” y no sólo a la “persona en el trabajo”, teniendo en cuenta la carrera y la etapa de la vida de los colaboradores.
Transformar el enfoque de compensación total hacia un enfoque que será vehículo para brindar bienestar total al colaborador contribuirá a resolver los desafíos de atracción y fidelización de talentos.
Este nuevo enfoque es un encuadre personalizado y ascendente, que coloca al colaborador en el centro de la ecuación y busca mejorar su experiencia dentro de la organización, aprovechando la cultura y el liderazgo, y logrando alcanzar resultados personales, organizacionales y sociales.
Dichos resultados garantizarán que las empresas no sólo obtengan un retorno de la inversión en compensación, sino que también entreguen valor a sus colaboradores.
Quienes apliquen este enfoque estarán mejor posicionados para atraer, involucrar y fidelizar a los mejores talentos, así como para lograr una fuerza laboral más motivada y productiva que impulse el desempeño corporativo y retornos para los accionistas.
Cabe destacar que este enfoque está desarrollado de manera de adaptarse a las necesidades y preferencias cambiantes de los colaboradores. Por lo tanto, permite diseñar una estrategia que contemple la personalización y la opcionalidad necesarias para alcanzar el bienestar de una fuerza laboral en evolución.
Fuente: PwC - Rethinking Total Reward to deliver Total Wellness