Por cada 10 computadoras que entran al mercado se desechan cinco usadas

La cifra es aproximada pero se acerca bastante a la realidad, según los datos divulgados durante un seminario sobre e-waste (residuos electrónicos), un tema del que se viene hablando hace por lo menos cinco años sin mucho éxito. Incluso hay un anteproyecto de ley sobre gestión integral de los residuos que deambula por la comisión ambiental del Senado desde 2008. El único dato “posta” del que se dispone es que en base a documentos aduaneros, en 2010 ingresaron al país unas 210.000 computadoras (entre desktops, notebooks y netbooks) y 954.000 celulares.

La estimación de lo que se desecha es 100.000 computadoras por año por lo que la relación indica que por cada 10 que se suman al mercado, se desechan cinco. De los celulares no hay ni siquiera estimaciones. Pero en la definición de desechos electrónicos también entran productos de línea blanca (heladeras, cocinas, calefones, freezer), línea marrón (televisores, radios, videos, DVD), además de la línea gris (computadoras, celulares, monitores). A todos estos equipos se suman los juguetes electrónicos y cualquier otro aparato incluyendo cajeros automáticos y equipamiento médico. En el seminario se habló de que en Latinoamérica los países que generan más residuos electrónicos son Chile (31,4%), Argentina (20,7%), Brasil (20%), México (19,3%), Venezuela (13,8%) y Colombia (8,3%). Aunque las cifras para nuestro país aún no están medidas, se estima que el porcentaje de residuos es similar al que presenta Chile.

El sol ahora brilla en 15 departamentos (El Dorado llega por primera vez a Durazno)

Ya casi como una cábala que viene repitiendo hace unos años, mientras todos hacen balances de fin de año, El Dorado transforma a diciembre en su mes de aperturas. En esta oportunidad, con una inversión de 4 millones de dólares, la firma pionera en el supermercadismo del interior del país, abrió por primera vez una sucursal en el departamento de Durazno –llegando así a 15 de los 19 departamentos– y abrió también un nuevo local en el barrio Pueblo Obrero de Piriápolis.