Según marketingdirecto.com, aunque las nuevas tecnologías han cambiado la forma de relacionarse en sociedad, ayudan a que las personas expresen sus emociones, especialmente a través de las redes sociales. Con motivo del Día Internacional de la Felicidad, que se celebró el 20 de marzo, Adglow ha analizado el efecto que producen este tipo de plataforma.
A escala global más de dos mil millones de usuarios se encuentran activos en alguna red social. En base a los datos del último Estudio Anual de Redes Sociales de IAB Spain y Adglow,en España este tipo de plataformas cuentan con más de 19,2 millones de internautas entre 16 y 65 años.
Según revela Statista, Facebook es la red social que más atrae a los usuarios, ya que cuenta con más de 1.900 perfiles. Por detrás le sigue Instagram, con más de 800 millones de usuarios y LinkedIn con más de 500 millones.
Adglow ha detectado que, de todo el contenido que se comparte en estas redes sociales, las publicaciones que se hacen más virales son las que despiertan emociones entre sus usuarios. En línea esta línea un artículo de Journal of Consumer Marketing recoge que las imágenes en las que aparecen personas felices producen felicidad en quien las ven. Esto se debe científicamente a las neuronas espejo, las cuales hacen a una persona imitar aquellas emociones que observa a su alrededor.
Además, las emociones positivas se contagian más que las negativas. Una investigación de la Universidad de California puso de manifiesto que el primer tipo de emociones se propagan en las redes sociales en la misma medida que en la vida real.
Según esta misma investigación, las publicaciones con noticias positivas obtienen siempre más “me gusta” que las negativas. Esto se debe a que el efecto de los “likes” activa las mismas áreas del cerebro humano que si se gana dinero o se come chocolate.
Fuente: marketingdirecto.com