De acuerdo con un informe de PwC,* entre 2011 y 2019 las mujeres de los países miembro de la OCDE han progresado en su empoderamiento. Pero este avance ha sido muy lento: de acuerdo con el estudio, a la fuerza laboral femenina le llevaría 24 años de trabajo alcanzar la incidencia de la masculina en el mercado y 112 años cerrar la brecha salarial. Si bien estas cifras son alarmantes, se estima que serán peores si consideramos los efectos de la pandemia.
Pero ¿por qué está empeorando la situación para las mujeres? En primer lugar, porque los empleos de los sectores más golpeados por la pandemia son mayoritariamente realizados por mujeres.
En segundo lugar, porque la pandemia ha amplificado las inequidades salariales, considerando el trabajo no remunerado, tanto doméstico como de cuidados (antes de la pandemia, las mujeres destinaban 6 horas más que los hombres a los cuidados de los hijos e hijas).
Es por esto que los gobiernos y las empresas debemos trabajar juntos para avanzar más rápidamente hacia la igualdad de género. Para ello, entre muchas acciones posibles, debemos evaluar activamente los efectos de la desigualdad y empoderar a las mujeres para que puedan participar en la fuerza laboral, así como abordar las desigualdades de género subyacentes en cuanto al trabajo doméstico y los cuidados no remunerados.
*Informe Women in work 2021: the impact of COVID-19 on women work
Por:
María José Barreiro, gerente de Gestión Humana de PwC Uruguay.