Hoy, necesitamos saber cómo acceder y procesar la información para convertirla en conocimiento, generar nuevas ideas y solucionar problemas. La revolución digital requiere una revolución de habilidades: se trata de ayudar a las personas a desarrollar su conciencia, comprensión y competencias digitales para participar plenamente en el mundo digital, y debe comenzar ahora.
Para esto, se requerirán personas dispuestas a aprender a lo largo de su vida. Aprender a aprender es la capacidad de conocer, organizar y autorregular el propio proceso de aprendizaje. Supone desarrollar la metaatención (la conciencia de los propios procesos para atender lo importante) y la metamemoria (la conciencia de los propios procesos para captar y recordar la información).
Quienes aprenden a aprender logran percibir sus mecanismos de aprendizaje, monitorear su desempeño, corregirlo y mejorarlo. Este aprendizaje se traslada más allá del ámbito académico, al contexto personal y laboral. La responsabilidad no se centra solo en la academia, sino que requiere un gran compromiso de los trabajadores para construir su conocimiento a partir de sus aprendizajes y experiencias anteriores, con el fin de reutilizar y aplicar el conocimiento y las habilidades en distintos contextos.
Por:
Cecilia Rodríguez, gerente de Selección de Personal de PwC Uruguay.