Vie 28/08/2009
De a poquito, las empresas uruguayas dedicadas a la producción de fitoterápicos están encontrando su mercado. Pero todavía hay piedras en el camino, que los empresarios puntualizan en la falta de una ley para el sector, la dificultad de acceso al financiamiento y la escasa inversión en investigación y desarrollo (I+D).
En China, los preparativos tradicionales a base de plantas representan entre el 30% y 50% del consumo total de medicamentos. En San Francisco, Londres y Sudáfrica, el 75% de las personas que padecen VIH/SIDA utilizan la medicina tradicional. Por eso, en Uruguay consideran que hay un gran potencial exportador. Actualmente las exportaciones anuales tienen tan sólo un promedio cercano a los US$ 8.000 mientras que las ventas en el mercado local arañan los US$ 400.000. En 2005 se formó la “Cámara Uruguaya de Fitomedicamentos, productos naturales y afines” integrada por 25 empresas y un año más tarde el consorcio Phyto Uruguay, integrado por Botica del Señor, Laboratorio Guillermo Lockhart, Homeopatía Hahnemann, Laboratorios Abies, Grinlab, Onacril, Natural Life, Perales del Sur, Tepyve y Urumarket.