El pasado martes el Centro de Estudios de la Realidad Económica y Social (CERES) organizó un desayuno exclusivo para más de 350 personas, quienes atentamente escucharon las palabras de Ignacio Munyo acerca de la situación económica actual a nivel global, regional y nacional.
El evento, realizado en el Club de Golf del Uruguay, sirvió como oportunidad para reunir a los principales empresarios del país, socios de CERES, quienes obtuvieron un pantallazo preciso de los desafíos del Uruguay en un mundo convulso por los efectos posteriores de la pandemia y la guerra en Ucrania.
En cuanto la actividad económica en Uruguay, el economista destacó que, de acuerdo con el Índice de Riesgo País -diseñado para medir la inseguridad que representa una nación para inversores extranjeros- “por primera vez en la historia moderna tenemos el menor riesgo país de América Latina”.
Munyo puso el acento en las oportunidades a las que hará frente Uruguay en los próximos meses, refiriéndose a la segunda mitad de este año como “el segundo tiempo de un partido que Uruguay todavía puede ganar”.
El director ejecutivo de CERES remarcó que “para alcanzar la victoria hay cinco áreas en las que se necesitan mejoras urgentes: las tarifas públicas, la seguridad social, la educación, la regulación laboral y la inserción internacional”, agregando que “Uruguay necesita impulsar la agenda de reformas comprometida”.
Acerca de un tema complejo como es la educación, el titular de CERES sostuvo que “silenciosamente se está procesando un cambio en el ADN, como se había prometido en el pasado, ya que está en marcha un cambio profundo del marco curricular de la enseñanza primaria y media”.
“La esencia del cambio es muy simple: adaptar los programas vigentes a la realidad basado en las competencias necesarias para el mundo actual -dijo Munyo-. Ojalá se pueda concretar. Se hizo un trabajo muy serio que está a la altura de las necesidades. El país lo necesita con extrema urgencia”.
La importancia de profundizar en la inserción internacional
Para Munyo la inserción comercial del Uruguay es uno de los puntos más importantes. Los viajes a Emiratos Árabes Unidos, Estados Unidos, Francia, España y México realizados en representación de CERES entre marzo y junio de 2022 confirman un hecho: “en todos lados quieren invertir en Uruguay”-
“A fines del año pasado -destacó Munyo-, en este mismo escenario decíamos que la apertura era la madre de todas las reformas, seguimos pensando lo mismo. Con las cartas del actual contexto global sobre la mesa, creemos que hoy es necesario expandir las relaciones comerciales de Uruguay con Europa, América del Norte -Estados Unidos y México, con quien tenemos un TLC que se puede aprovechar más-; con Corea y Japón que son mercados muy atractivos y nos miran con buenos ojos; y con el mundo árabe -Emiratos Árabes y Arabia Saudita-, como venimos insistiendo hace tiempo y lo vamos a seguir haciendo”.
En esa misma línea destacó la significancia de la Exposición Universal que se llevó a cabo recientemente en Dubái, visitada por 24 millones de personas y a la que en marzo asistió una delegación de CERES.
Munyo informó que Uruguay confirmó su participación en la próxima Expo Universal que se llevará a cabo en Osaka en 2025 e invitó al gobierno y al sector privado a “empezar a trabajar desde ahora para aprovechar la oportunidad”.
“Es necesario empezar a trabajar ya mismo para Osaka. Uruguay ha logrado tener una excelente imagen internacional de país serio con calidad institucional que trasciende gobiernos. Esa imagen merece ser potenciada, cultural y comercialmente, con una presencia destacada en la próxima Expo. Estamos a tiempo y tenemos las capacidades para hacerlo”, remarcó el director ejecutivo de CERES.
Una de las novedades más importantes que presentó Munyo es el análisis que se realizó del organigrama del Estado uruguayo. Este estudio tuvo como propósito detectar dónde “están escondidos los cuellos de botella para la inversión, dónde se trancan -y muchas veces naufragan- los proyectos de inversión”.
CERES detectó estos cuellos de botella en la DGI, el BCU, la Dirección Nacional de Migración, la Junta Penitenciaria del MSP y el BPS, entre otros.
La clave es la inversión
Hacia el final del desayuno, el titular de CERES dijo que “el gran desafío al que se enfrenta el país es aumentar la inversión”. De hecho, Munyo lo calificó como un “asunto de altísima relevancia” para el país.
Los cambios tributarios mundiales anunciados han puesto en cuestión algunas de las principales herramientas para atraer inversiones a nuestro país. Al mismo tiempo se debe analizar el impacto de una reducción generalizada del Impuesto a las Rentas de las Actividades Económicas (IRAE) a todas las empresas.
“También es necesario estudiar sistemas de compensación para las empresas multinacionales afectadas -destacó el economista-. Por más difícil que sea alcanzar el aumento de la inversión, el interés que existe en el mundo para invertir en Uruguay es enorme y creciente, por lo que el pie debe estar puesto en el acelerador”.
Para cerrar, Munyo expresó que “la excelente imagen internacional del país debe ser aprovechada con la concreción de inversiones de una magnitud tal que sostenga una senda de desarrollo sostenible en el tiempo, y para ello se necesitan cambios”.
Al final concluyó que, una vez terminada la pandemia, el contexto mundial toma “bien parado” al Uruguay, con consensos entre los partidos que conforman la coalición que gobierna, por lo que el país se encuentra “en muy buenas condiciones para, haciendo las reformas necesarias, ganar el partido”.