Alejandro Berrutti, director de Portfolio Capital, lideró este martes la primera reunión con los 403 inversores afectados por el impago de US$ 15 millones. Durante el encuentro, la empresa presentó una propuesta de reestructuración que promete devolver el capital en un plazo de 10 a 12 años, aunque sin ofrecer garantías sólidas. InfoNegocios tuvo acceso exclusivo a los detalles de esta reunión, donde surgieron fuertes cuestionamientos por la falta de transparencia y el historial de pérdidas del negocio.
El plan presentado por Berrutti se basa en tres ejes principales. En primer lugar, la creación de un fideicomiso con activos ganaderos que incluiría establecimientos y existencias de ganado, aunque sin una valoración detallada. En segundo término, el aprovechamiento de una filial denominada "VV" dedicada al comercio internacional de carnes. Por último, se propone un sistema de cogobernanza donde un consejo directivo con participación de inversores supervisaría las sociedades Reina Vaca S.A. y Cuero Rojo S.A., las principales involucradas en el esquema de inversiones.
Sin embargo, el extenso plazo de recuperación -que podría llegar a 15 años para algunos casos- generó inmediato escepticismo entre los asistentes. "¿Cómo pueden garantizar que este plan funcionará si durante los últimos tres años solo hemos visto pérdidas?", cuestionó uno de los inversores presentes en la reunión.
Los cuestionamientos no se hicieron esperar. Los inversores destacaron varias irregularidades, comenzando por el aumento de la rentabilidad prometida del 7% al 9% anual en 2024, cuando el negocio ya mostraba claras señales de inviabilidad. También recordaron el sorpresivo default del 20 de mayo, cuando apenas una semana antes la empresa había solicitado datos bancarios a los inversores, sugiriendo que realizaría pagos que finalmente no concretó. Otro punto polémico fue la mención a un socio colombiano no registrado que habría abandonado el país sin asumir responsabilidades. Según fuentes de InfoNegocios, perteneciente al Grupo Pampas.
La situación legal de Portfolio Capital sigue siendo compleja. Varios inversores ya presentaron denuncias por posible estafa financiera y solicitaron la apertura de un concurso de acreedores. Frente a esto, Berrutti argumentó que la vía judicial "solo generará desgaste para todas las partes", aunque admitió que la empresa acatará la decisión que tome la mayoría de los afectados.
El escenario que se presenta es complejo. Por un lado, los inversores deberán decidir en la segunda reunión convocada para este martes 11 de junio si aceptan el plan de reestructuración o insisten en acciones legales. Por otro, el Banco Central del Uruguay podría intervenir en el caso, especialmente considerando que ya en febrero había emitido advertencias sobre operaciones no autorizadas vinculadas a Portfolio Capital.
Mientras tanto, los afectados se enfrentan a una difícil disyuntiva: confiar en un plan de recuperación que carece de garantías concretas o iniciar un largo proceso judicial en un caso que presenta cada vez más características de un esquema Ponzi. La decisión que tomen en las próximas horas podría marcar el futuro no solo de Portfolio Capital, sino también del sector de inversiones ganaderas en Uruguay, que atraviesa una de sus peores crisis en años.