BTG Pactual, que se define a sí mismo como “el mayor banco de inversiones de América Latina”, apuesta fuerte por Uruguay. Tras anunciar la adquisición de la operación local de HSBC por US$ 175 millones, la firma brasileña se fija un objetivo claro: posicionarse entre los tres principales bancos del país en los próximos años.
“Hoy el market share es de alrededor del 7%, pero nuestra intención es que sea mayor y estar en el top 3 en un plazo de dos o tres años”, afirmó Rodrigo Goes, socio y responsable de BTG Pactual para América Latina, en una entrevista exclusiva con InfoNegocios.
La compra incluye las cinco sucursales actuales de HSBC en Uruguay, que se mantendrán, al igual que todo el equipo que lidera Constantino Gotsis, quien seguirá al frente como CEO local. Goes aseguró que el cambio de marca a BTG Pactual se concretará una vez que la operación reciba la aprobación del Banco Central, un proceso que podría demorar entre seis y doce meses. “La charla con el regulador fue muy buena, se mostró contento con la transacción, que es histórica para Uruguay”, agregó el ejecutivo.
La operación forma parte de la estrategia de expansión regional que BTG inició hace una década y que ya lo llevó a Chile, Colombia, México, Perú y Argentina. Según Goes, Uruguay era una pieza que faltaba en el mapa. “En HSBC encontramos una oportunidad muy interesante. Empezamos a hablar hace seis meses, fue una negociación directa, no un proceso abierto. Uruguay es un mercado pequeño, pero con estabilidad atípica para la región, un regulador independiente y retornos bancarios muy atractivos”, explicó.
El sistema financiero uruguayo, destacó, es uno de los más consolidados de América Latina. “Los retornos en Uruguay son mayores que los nuestros en Brasil, donde el ROAE fue del 23% el año pasado. Eso muestra lo atractivo que es este mercado”, subrayó. A esto se suma la creciente llegada de grandes patrimonios a Uruguay. “Cada vez más brasileños, además de argentinos, están eligiendo el país como residencia fiscal, lo que genera sinergias muy interesantes para nuestro negocio de wealth management, que es muy fuerte en Brasil”, comentó.
Sobre la integración, Goes aseguró que la compañía busca mantener el talento local y sumar el know-how global del grupo. “Somos humildes para entender que no podemos llegar y pensar que vamos a hacer negocios sin gente local. El liderazgo seguirá siendo uruguayo. En otros países, como Chile y Colombia, incorporamos algunas personas de Brasil, pero en general son equipos locales con apoyo puntual”, afirmó.
Uno de los diferenciales que BTG promete traer al mercado uruguayo es la tecnología aplicada a la banca digital. “Hemos invertido mucho en nuestra plataforma digital y queremos trasladarla a Uruguay, como hicimos en Chile y Colombia. Además, ofreceremos acceso a nuestra red internacional y a una operación de asset management que supera el billón de reales en activos”, señaló. La compañía también planea hacer una campaña de marketing previa a la aprobación del regulador para generar conocimiento de marca en un mercado donde BTG aún no es conocido.
En cuanto a infraestructura física, la firma mantendrá las cinco sucursales actuales y no descarta abrir nuevas. “Hoy la tendencia global es hacia la digitalización y cierre de sucursales, pero con solo cinco oficinas no creemos que haya necesidad de reducirlas. Incluso podríamos analizar sumar alguna más en el futuro”, adelantó.
El valor de la transacción, estimado en US$ 175 millones, podría sufrir ajustes hasta el cierre, previsto para 2026, dado que las negociaciones se basaron en los números de 2024. “Financiamos la operación con fondos propios”, confirmó Goes.
El desembarco en Uruguay está respaldado por la fortaleza financiera de BTG Pactual. Según el reporte de resultados del primer trimestre de 2025, al que InfoNegocios tuvo acceso, el banco reportó un lucro líquido ajustado de R$ 3.367 millones (unos USD 670 millones), un ROAE del 23,2%, ingresos totales por R$ 6.837 millones y activos que alcanzaron los R$ 608.400 millones. Su patrimonio líquido es de R$ 60.000 millones, mientras que la cartera de crédito ascendió a R$ 230.600 millones, con un crecimiento interanual del 27%. Tanto Wealth Management como Asset Management superaron el billón de reales en activos bajo gestión, reflejando el peso del negocio de inversiones en la estrategia global del grupo.
“Queremos traer todo esto a Uruguay: expertise, soluciones y acceso a inversiones globales. Nuestra misión es llevar América Latina al mundo y traer el mundo a América Latina”, concluyó Goes.