El subsidio es impulsado por los tres ministerios y es a nivel nacional. Lo que se subsidia es la diferencia entre un precio de un ómnibus de diesel y uno eléctrico. El valor de referencia de un diesel es de US$ 140 mil y el precio del ómnibus eléctrico es de US$ 450 mil, entonces el operador solicita el préstamo (trayendo una oferta de un proveedor). Osea que los que compran los ómnibus son los operadores, cuando se otorga el subsidio que cubre la diferencia entre el diesel y el eléctrico.
Según confirmó el coordinador de proyecto Movés, Ariel Álvarez las flotas van a consumir energía renovable, autóctona producida en Uruguay.
A este subsidio se pueden postular todos los operadores de transporte público del país, Montevideo e interior. Según afirma Álvarez no es solo un cambio tecnológico sino que se busca ofrecer accesibilidad a la población.
“Se busca una mejor accesibilidad ya que los pisos de los ómnibus son bajos, se podrá facilmente subir con sillas de ruedas, tiene mejoras en el confort tendrán aire acondicionado y cámaras de videovigilancia para la seguridad de los pasajeros”.