ABenson & Thomas sigue apostando al arte en sus vidrieras (siempre de la mano de Carlos Presto)

El arte contemporáneo no tiene límites ni parámetros establecidos. El arte contemporáneo, al servicio comercial, puede adoptar múltiples formas: desde el diseño industrial con toques creativos al montaje de una vidriera. En este último caso, de la mano del artista plástico Carlos Presto, la empresa de indumentaria y calzado masculino Benson & Thomas viene haciendo de sus windows display un concepto genuino de arte contemporáneo. Tan actual y moderno que, con las libertades que tiene el arte, bien podría denominarse “vidrieras para que nadie mire”.

Desde hace al menos cinco años, Benson & Thomas, la firma de indumentaria y calzado masculino que cuenta con cuatro locales en Montevideo –Punta Carretas Shopping, Montevideo Shopping, Carrasco y Ciudad Vieja–, viene poniéndole mucho talento a las vidrieras de sus negocios, invitando para ello al artista plástico Carlos Presto, quien lleva adelante el montaje de las vidrieras como si fuesen instalaciones artísticas que, independientemente de los productos o los maniquíes, cuidan del espacio como si fuera una tela en un caballete.

En cada temporada (entre cinco o seis vidrieras al año), la firma apuesta por una estética y concepto distinto, y lo hace simultáneamente en todos sus locales, lo que genera un atractivo artístico en distintos puntos de la ciudad. Es decir, así sean más de 300 hula hulas de colores o patitos de plástico flotando en agua dentro de bolsas de plástico, la idea siempre es crear composiciones basadas en la multiplicación exponencial de objetos que, por sí solos, no tienen valor.

En esta oportunidad, el concepto que la empresa está montando en sus vidrieras tiene que ver con lo orgánico, con una visión más ecologista, de ahí la elección de cajas de huevos que, en parte, juega con la gama de colores más tenues que tendrá la colección.  

El montaje comenzó esta semana, primero en local de Montevideo Shopping y luego en Carrasco, pero las medidas implementadas para contener la propagación del coronavirus, que provocó el cierre de centros comerciales y negocios, transformó esas obras en “vidrieras para que nadie mire”, obras tan genuinas e innovadoras que todavía no consiguieron un público para apreciarlas.

Al menos por un tiempo.

Nunca es tarde para crecer (Paysandú Shopping Terminal se expande en m2 con 6 millones de dólares de inversión y llegan nuevas marcas)

A casi una década de su apertura –más precisamente el 13 de octubre de 2016– y con varias obras desde ese entonces a la fecha, Paysandú Shopping Terminal espera inaugurar en diciembre de este año la ampliación de unos 2.000 m2, en cuyos locales se instalarán nuevas marcas para el público sanducero. Según adelantó Carlos Lecueder a InfoNegocios, “se trata de la llegada de Adidas, ⁠BAS, ⁠Guapa! y Paprika, más una marca del grupo Bestseller”.

La buena vida también es un sabor en el paladar (Agua de Kefir vende 1.000 litros al mes)

Cuando iniciaron el negocio, en 2021, vendieron apenas 20 litros. Ahora, con más de 60 puntos de venta en varios departamentos del país, Patricia Amoroso y Juan Izuibejeres, creadores de Wellness Factory, comercializan alrededor de 1.000 litros al mes de Agua de Kefir, una bebida natural que se ofrece como alternativa a los refrescos y cuyo origen –milenario– se presume es de la región del Cáucaso, donde la palabra kéfir significa buena vida.