Cardenuto comienza su columna diciendo: “En la era de la movilidad, los dispositivos como los smartphones o las tablets son los nuevos escritorios de los empleados. La anécdota es elocuente. Estaba en un aeropuerto conversando con un colega. De repente, llega a mi smartphone un mensaje con un archivo cuyo contenido era interesante para ambos. Le pregunté si él también lo había recibido y me respondió que no. Entonces decidí compartírselo y se lo envié en el momento. De inmediato, ocurrió que, al mismo tiempo que mi colega recibía el archivo que yo le había mandado y se disponía a leerlo, en mi teléfono llegaba un mensaje de su casilla, advirtiéndome que no podía contactar a ese destinatario porque se encontraba fuera de la oficina. Recuerdo que le dije que no me parecía lógico que, estando en plenas condiciones de responder sus mensajes, hubiese puesto el aviso automático. “Es algo que hago sin pensar cada vez que sé que voy a estar ausente unos días de mi oficina”, me respondió”. Y prosigue más adelante: “Vale aclarar que los mensajes de “out of the office” nacieron en los 90, cuando el correo electrónico descansaba en una PC ubicada fija en un escritorio. En ese momento, era muy claro y distinguible cuándo una persona estaba “dentro de su oficina” y cuándo “fuera de su oficina”. Los tiempos cambiaron y hoy el trabajo de una buena parte de los empleados de las empresas consiste en estar con los clientes, viajando por el mundo, negociando con un socio, dando una conferencia de prensa… Y muchas funciones que antes los ejecutivos podían hacer sólo desde sus escritorios “físicos”, hoy pueden ejecutarlas en cualquier momento y en cualquier lugar”.
El presidente de SAP destaca que además los smartphones, las plataformas de software como las que provee su empresa le permiten a un ejecutivo tomar una orden de compra desde la casa del cliente, verificar el stock, aprobar un presupuesto, cargar los gastos de viaje en el momento en el cual los está realizando, acceder a la historia clínica de un paciente desde cualquier lugar.
“Tal vez, en esta nueva era de la movilidad, haya llegado la hora de colocar el siguiente mensaje automático para que responda nuestra casilla de correo electrónico: “Estoy fuera de la oficina… ¡Pero eso no quita que no pueda responder de inmediato!”, concluye Cardenuto.
Conozco el caso de una empresa cordobesa que hace grandes impresiones, cuyos ejecutivos de ventas le pidieron al dueño que les proveyera de sendos smartphones y les flexibilizara sus horarios laborales para pasar más tiempo con sus familias. Así lo hizo (con cierta desconfianza por cierto), pero al tiempo comprobó que la productividad de sus empleados había mejorado notablemente. Es cierto Rodolpho, la tecnología ha evolucionado, solo falta que muchos de nosotros también lo hagamos.