Vie 04/07/2008
Si compras botas en Canadá, seguro llevan cuero uruguayo.
La curtiembre Curlan, empresa familiar fundada en 1986 por Héctor Martínez y su esposa Silvia Fortunato, se dedica a la producción de cueros lanares terminados y prontos para confeccionar vestimenta y calzado, en particular botas. Sus datos de producción y facturación los ubican terceros frente a su competencia. Pero siguen peleando por llegar a ser primeros. Exportan toda su producción a mercados de Europa, China, Japón, Canadá, Estados Unidos y México. Tienen 45 empleados y según nos comentaron, les va tan bien porque apuestan a “estar siempre presentes, a cumplir a tiempo con las entregas” y a tener una mercadería de primera.
- La curtiembre Curlan, empresa familiar fundada en 1986 por Héctor Martínez y su esposa Silvia Fortunato, se dedica a la producción de cueros lanares terminados y prontos para confeccionar vestimenta y calzado, en particular botas. Sus datos de producción y facturación los ubican terceros frente a su competencia. Pero siguen peleando por llegar a ser primeros. Exportan toda su producción a mercados de Europa, China, Japón, Canadá, Estados Unidos y México. Tienen 45 empleados y según nos comentaron, les va tan bien porque apuestan a “estar siempre presentes, a cumplir a tiempo con las entregas” y a tener una mercadería de primera.