A esta escuela no vale hacerse la rata.
Desde ahora, para poder gobernar habrá que volver a las aulas. No basta con ser abogado, escribano o ingeniero. Expertos en administración pública, instituciones y politología se encargarán de formar a quienes un día desempeñen responsabilidades de gobierno en Uruguay. La "escuela para gobernantes" fue acordada entre el Parlamento uruguayo y la Fundación Giménez Abad que cuenta con el apoyo de la Corte de Aragón, España, y proporcionará financiamiento, además de docentes.
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