El mercado está en constante expansión y, con este contexto como impulso, la industria está cada vez más enfocada en aplicar y adoptar nuevas tecnologías y formas en medios de pagos, en comparación con las utilizadas frecuentemente. Por esto, un estudio como “Números que hablan – Volumen I. Un estudio con información de valor para decisiones inteligentes”, realizado por Fiserv, es más que interesante y vale señalar los datos más destacados del mismo.
Por ejemplo, en un total de 500 casos, el efectivo y la tarjeta de débito se destacan como los medios de pago habituales. Esta última es el medio preferido por el 67% de los encuestados. De hecho, 57% de los encuestados abandonó el uso del efectivo y lo reemplazó por tarjeta de débito (46%) y transferencias (47%).
También cabe señalar que si bien se registra aún un alto porcentaje de desconocimiento (63%) en cuanto al funcionamiento de billeteras virtuales y QR, hay una gran intención de uso futuro. De hecho el uso de billeteras virtuales y QR está ligado a la búsqueda de promociones y descuentos para los usuarios y beneficios para los comercios (11%).
En compras con tarjetas de crédito y débito, los rubros que más crecieron fueron el e-commerce, las líneas áreas, la indumentaria, el combustible y los supermercados. En lo que se refiere al porcentaje de crecimiento que hubo en transacciones con tarjeta de crédito 2020 versus 2021 fue de 34%, mientras que el crecimiento en transacciones con tarjeta de débito en el mismo período fue de 19%.
En suma, como dice en el informe Javier Césari, gerente general de Fiserv para la región LAS, “como actores involucrados en este ecosistema financiero, es nuestra obligación continuar invirtiendo en el desarrollo de herramientas que estén a disposición de nuestros clientes para que estos puedan brindarles a los suyos más y mejores alternativas y, así, concretar sus transacciones”.
“El desafío para estos próximos años seguirá siendo -remarca Césari- desalentar el uso del efectivo y apostar por los pagos electrónicos, a fin de acelerar la adopción digital y lograr mayor trazabilidad e inclusión financiera, un objetivo que está claro en la industria”.
Esta claridad posiblemente no esté en el bolsillo de todos los ciudadanos todavía, pero hacia ahí se está yendo cada vez más… pin y verde.