En Zonamerica, el arte encuentra un lugar natural: un campus que desde su origen promueve la creatividad, la innovación y la diversidad cultural como pilares de una comunidad vibrante. La Colección Zonamerica refleja ese espíritu. No solo preserva y celebra la obra de grandes maestros, sino que integra el arte a la vida cotidiana del campus, incorporándolo a los edificios y espacios donde trabajan miles de personas. Así, colaboradores, visitantes y empresas conviven con la belleza, la sensibilidad y la historia que estas piezas transmiten. El arte se convierte así en parte esencial de su identidad y en un puente que une a las personas, enriqueciendo un entorno donde las ideas toman forma y crecen.
Resguardada durante décadas por su fundador y presidente, Orlando Dovat, se trata de una colección singular que ahora se abre al público. Es una oportunidad única para reencontrarse con la fuerza cromática de Dinetto y con el diálogo entre distintas generaciones de creadores uruguayos como Manuel Pailós, José Gamarra, José Gurvich, Cecilia Mattos, Gonzalo Fonseca, Pedro Figari y José Luis Zorrilla de San Martín, entre otros.
Para Dovat, coleccionar no fue un plan trazado, sino una evolución natural. “Cuando se me pregunta cómo empecé a formar una colección, la respuesta es que lo hice con lo que pude. Una cosa es lo que se tiene, y otra muy distinta lo que se admira”, señaló.
La pintura uruguaya, explicó, es extraordinariamente rica y diversa. “Todos tenemos, en mayor o menor medida, una colección personal, limitada por nuestras posibilidades. Hay quienes aun pudiendo comprar, dicen que ya no tienen espacio en sus casas. No fue mi caso, porque Zonamerica está lleno de paredes para colgar un cuadro más”.
Las obras llegaron a sus manos a través de remates, galerías, ventas privadas y, en algunos casos, directamente desde los talleres de los artistas. “En ocasiones las adquirí en la casa del propio artista. Así fue con Lino Dinetto, un gran creador y mejor amigo”, narró.
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