Como único postre, el festival presentó a Florencia Curcio, de Doméstico (Montevideo) que ofreció un Chocolate montado con agua de cayena y cuero de Arazá (también descubrimos, después de probarlo, que agregaba pimienta al chocolate). En materia de “wines” hubo variadas propuestas de Argentina, Uruguay, Australia y Chile. Sebastián Bossi, instructor sumiller invitado por Vinos del Mundo nos recomendó especialmente el Shiraz Australiano de Thomas Hyland, Penfolds. La Bodega El Esteco de Cafayate, Salta, presentó a su vino estrella, el Ciclos Malbec 2005. Por estos lares, Leslie Fellows, californiana y confesa amante del Uruguay, de la novel bodega Artesana presentó sus vinos tintos artesanales ultra premium y su novedoso Zinfandel uruguayo. Nos contó que en la bodega, además de degustar y comprar los vinos se puede ir a almorzar.
Al ingresar al salón, los chefs del Colegio de Cocineros Gato Dumas te recibían con una preparación especial de caracú-ossobuco.
Ejerciendo casi la localía, el emprendimiento Aguas del Sur (San Carlos), presentó en sociedad sus aguas premium que vienen envasadas en botellas de vidrio y tres variedades: Purest, Bera y Aqua. La planta tiene una capacidad de 100 mil litros por día y se encuentra sobre Camino de los Ceibos.
El público se fue pipón del Punta del Este Food & Wine. Aguas del Sur presentó sus aguas Premium
El viernes 26, el Ballroom de Mantra Resort Spa y Casino se convirtió en una especie de “paraíso” para los amantes de la buena cocina y el vino, en el arranque de la tercera edición del Punta del Este Food & Wine Festival, donde diez chefs, nueve bodegas y más de 400 personas intercambiaron placeres en la primera noche de festival, según nos cuenta nuestra “corresponsal” en Punta del Este, Ro Freda. Los chefs participantes se vieron evaluados durante la misma noche por los presentes, que debieron votar por el plato de mejor preparación. El premio (un iPod), recibido de manos de la ministra de Turismo Liliam Kechichian, fue para el chef Rodrigo Olivera del restaurante Mocoto de San Pablo, quien no paró en toda la noche de cocinar sus Daditos de Tapioca. Otra de las destacadas fue Mariana Muller del restaurante Cassis (Bariloche) que presentó un Strudel de cordero con reducción de sus jugos, acompañado con tomate fresco.
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