Inversores no le temen a los sindicatos uruguayos.

A pesar de algunas desventajas como la burocracia o la lentitud de algunas resoluciones, los inversores extranjeros siguen viendo a Uruguay como un buen lugar para traer proyectos. Y tampoco le temen a los sindicatos. A estas conclusiones seguramente llegaron los asistentes al almuerzo de ADM realizado ayer en el Complejo Riviera, en el que disertaron el argentino Guillermo Arcani (Carrasco Nobile), el dominicano Arturo Peguero (Parque de las Ciencias) y el brasileño Iraní Varella (Petrobras Uruguay) que muy brevemente expusieron algunas de las razones por las cuales las empresas que representan decidieron venir a Uruguay. Todos coincidieron en que una de las principales fortalezas es la estabilidad económica, social y jurídica.

Grupo RAS invertirá 40 millones de dólares para su proyecto ferroviario (siete locomotoras y 175 vagones)

(Por Mathías Buela) El proyecto del Ferrocarril Central surgió como una de las condiciones impuestas por la finlandesa UPM para instalar su segunda planta en el país, con el objetivo de tener una vía directa que la conecte al puerto de Montevideo. Mucha agua ha corrido bajo el puente y el proyecto ya se encuentra en fase de pruebas esperando para quedar 100% operativo. Sin embargo, UPM realizará seis viajes diarios (entre 21 y 31 viajes semanales), lo que deja capacidad ociosa para que otras empresas utilicen la infraestructura ferroviaria. Una de las primeras en decir “¡Yo quiero!” fue Grupo RAS.