Productos de primera y seguimiento a clientes.
La confitería Bretagne nace en 1966 en Carrasco pero se expande luego a la zona de Villa Biarritz. Además de dedicarse al rubro confitería, poseen una boutique de pan y ofrecen servicio de catering para fiestas y eventos. Según Carlos Tomás Muttoni, uno de sus directores, el mantenimiento de la calidad de las materias primas y el servicio al cliente han sido clave para el desarrollo de su negocio. Pero, para saber de primera mano que todo estuvo bien, casi todos los días llaman a sus clientes recientes para evaluar el servicio. Tienen una página web (ver aquí), donde los clientes pueden comprar on line y pedir asesoramiento. Cuentan con un staff de 60 personas.
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