Florencia comenzó sus estudios en USA de Química, luego de haber obtenido una beca, una vez recibida comenzó a trabajar en varias pasantías y ahí fue donde el mundo de la cosmética la cautivo.
Hoy en primera persona charlamos con Florencia Jinchuk.
¿Cuándo y cómo surge tu pasión por la ciencia?
Siempre tuve una fascinación absoluta por la ciencia, una curiosidad extrema por entender cómo funcionan las cosas, y una personalidad que tiende a profundizar en los detalles: buscar conexiones, analizar y hacer preguntas que vayan más allá.
Para mí, la ciencia siempre fue como una ventana que permite ver, comprender y asombrarse del mundo que nos rodea.
A los 18 años, cuando tuve que decidir qué estudiar, mi fascinación era ese “no sé qué” que yo percibía como magia en la ciencia. Supe desde chica que iba a estudiar química, si bien no sabía todavía lo que iba a implicar luego.
Como dijo Roger KORNBERG, Premio Nobel de Química en 2016
"La vida es química. Nada más, nada menos. Ella nos ayuda a entender el mundo a nuestro alrededor: el cuerpo humano y todo lo relacionado con la salud y el medio ambiente. La química está en la intersección entre la física, que son las leyes de la naturaleza, y la biología, que es su manifestación. Sin conocer la química, no puedes tomar decisiones informadas sobre tu salud ni sobre el medio ambiente."
En mi último año de colegio, mi profesora de química me contó sobre una beca para estudiar Licenciatura en Química en Estados Unidos y, sin darle mucha vuelta, apliqué.
Al segundo año de mi Licenciatura, hice una pasantía en una fábrica de productos químicos en Nueva York y ahí conocí el mundo de la cosmética y la posibilidad de dedicarme a eso desde mi profesión. Es así que, luego de terminar la carrera, comencé una Maestría en Ciencias Cosméticas.
¿Cómo fue la creación de tu marca "The Chemist Look"?
The Chemist Look nació en 2015 como un blog que miraba a la cosmética desde la óptica de la química y la ciencia. Después de siete años estudiando en Estados Unidos, finalmente volví a Uruguay con muchas ganas de ponerle voz a todo lo que pensaba y con el deseo de hacer algo distinto respecto a lo que la industria hacía y ofrecía. Es así que empecé a compartir mi visión sobre la industria cosmética a través de un blog que, poco a poco, se fue tornando en una comunidad de personas que pedían recomendaciones y compartían mis opiniones sobre distintos productos del mercado.
Luego de escuchar a mis lectoras y entender lo que necesitaban, me animé a crear productos que cristalizaran esa visión que compartía en el blog. Me acuerdo que comencé formulando una tanda muy chica de ácidos exfoliantes para vender a mis lectoras y, desde ese momento, The Chemist Look nunca frenó.
Hoy, nuestro compromiso como marca es mantenernos actualizados sobre los últimos descubrimientos en el estudio del envejecimiento para encontrar puntos donde intervenir y tomar acción, en nuestro caso, a través de productos para la piel. Tal como en los inicios, seguimos enfocándonos de manera obsesiva en formular las combinaciones más efectivas para nuestros consumidores.
Contanos cómo ha sido el proceso de desembarcar en otros Países y las diferencias que ves de la clienta de la marca en los distintos países.
Siempre entendí a The Chemist Look como una marca con raíces locales pero con proyección global, porque nuestra escuela de formulación tiene el potencial de agregar valor en cualquier mercado.
El primer país al que nos expandimos fue Argentina, en 2018. Desde las primeras formulaciones en Uruguay, la idea de cruzar el río fue siempre muy atractiva, ya que el blog tenía, desde hacía varios años, seguidoras argentinas que leían las notas y nos pedían productos. Por suerte, el desembarco fue un boom y superó cualquier expectativa. El público argentino está muy informado en lo que respecta a la cosmética y al cuidado de la piel. Están acostumbrados a leer e informarse antes de comprar, y están abiertos a analizar nuevas propuestas y ver cuáles son los últimos desarrollos. Por eso creo que nuestros productos fueron súper bien recibidos, porque son formulaciones de vanguardia muy eficaces.
En Chile desembarcamos con nuestra tienda online en 2018. Desde ese entonces, nuestra presencia de marca viene creciendo y este año decidimos ampliar la estrategia apostando a un retailer importante, como es DBS Beauty. Creemos que es el aliado clave para darnos a conocer, y permitir que la clienta tenga una experiencia en el punto de venta. Estamos confiados que quienes conocen nuestros productos terminan por amarlos.
En 2022 logramos expandirnos a Brasil, donde nos encontramos con un mercado totalmente distinto, más complejo. En primer lugar porque es un país con mucha mayor población y, en consiguiente, con mayor demanda. Y, en segundo lugar, porque hay más oferta internacional que cubre gran parte de esa demanda. Además, el mercado de la categoría Beauty en Brasil está liderado por productor de haircare y bodycare, por lo que el skincare sigue siendo una rama en crecimiento pero no tan consolidada como en Argentina o Uruguay.
¿Están pensando en desembarcar en nuevos mercados?
En The Chemist Look siempre estamos buscando incluir los últimos avances de la ciencia y tecnología; buscamos ofrecer al público alternativas innovadoras, produciendo los productos que nosotras mismas quisiéramos tener y usar. Creemos que nuestra formulación tiene el potencial de sumar valor en cualquier mercado, por lo que me encantaría expandirnos a nuevos países y buscar nuevos desafíos en distintos públicos. Sin embargo, creo que ahora estamos en una etapa en la cual los próximos pasos implican afianzar los mercados en los que ya operamos mientras evaluamos posibles mercados nuevos.