Esta firma chilena, propone lentes de alta calidad desde el año 2012, bajo una lógica particular: en lugar de generar un proceso lineal y extractivo, las produce a través de un modelo circular y regenerativo.
Sus gafas están hechas con materiales reciclados, trabajando con comunidades rurales de la Patagonia para recolectar la materia prima, además de ser carbono neutrales. Karün desarrolla los productos que el mundo quiere, bajo los estándares que el planeta necesita.
Asegura calidad y versatilidad en cada diseño, mientras construye una cadena de valor circular y bajo un modelo regenerativo, además de priorizar la transparencia en sus procesos. Esto lo hacen a través de la medición y publicación de la huella de carbono de todos sus productos y a la vez gracias a su nueva tecnología de trazabilidad. Esta fue lanzada este año, en la cual por medio de tecnología blockchain te permite seguir la ruta de tus gafas desde que el material descartado es recolectado en la naturaleza hasta que se convierte en anteojo, asegurando así transparencia y trazabilidad en cada uno de sus procesos.
Todo esto para que las personas puedan tomar decisiones de consumo más conscientes con el medio ambiente y sociedad que construimos juntos.
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