A lo largo de cuatro generaciones, la familia Marichal ha transitado el camino de la historia del vino en Uruguay, pasando de viticultores a bodegueros hasta llegar a un profundo desarrollo enológico y una expansión de la marca a nivel internacional. Inquietos y apasionados, los hermanos Alejandro y Juan Andrés Marichal supieron que uno de los pasos que había que dar decididamente en su viñedo en Etchevarría, departamento de Canelones, era dedicar un poco de ese terroir a la uva Albariño.
“En Uruguay, dentro de las uvas blancas, la Albariño viene siendo desde hace un buen tiempo no digo que la variedad emblemática, no todavía, pero sí una variedad con un ascenso muy marcado en el paladar de los consumidores, que cada vez lo eligen más a la hora de tomar un vino blanco”, dijo Juan Andrés a InfoNegocios.
El enólogo explicó que la cepa -originaria de Galicia- tiene una excelente adaptación al clima uruguayo, alcanzando muy buenos resultados -de hecho, en dos décadas la uva pasó de tener solo dos hectáreas plantadas en todo el país a más de 80-, por lo que decidieron en 2019 plantar poco más de una hectárea en su viñedo (más precisamente 1,3 ha en espaldera), en un predio que prácticamente linda con Cerrillos, donde la Albariño comparte terroir con cuadros de Pinot Noir y Sauvignon Blanc.
“Es nuestra primera experiencia con la variedad -sostuvo Marichal-, por lo que hicimos una vinificación que se dividió entre un primer Albariño que se envasó pronto, que nos dio para unas 600 botellas que no salieron a la venta, y otro Albariño con un poco más de tiempo sobre borras, que lo llevamos dentro de la línea Reserve y alcanzó para envasar unas 1.800 botellas”.
Toda esta primera producción de Albariño de bodega Marichal está destinada al mercado local, a un precio que ronda los $ 470.
Ahora bien, según dijo a InfoNegocios el enólogo, la idea de avanzar con Albariño en su viñedo no queda acá, sino que seguirá en 2022 “un poco a instancias de esta primera buena experiencia que hemos tenido entre colegas y otro poco porque nuestros representantes comerciales en el exterior nos impulsaron a ello, existiendo ya un pedido desde Estados Unidos para comercializar nuestro Albariño allí, a un precio de US$ 20 aproximadamente”.
Según Marichal, para la vendimia 2022 espera alcanzar una producción entre 5.000 y 6.000 botellas de Albariño, lo cual promete y mucho, ya que la cosecha parece ser otra de las muy buenas para este año y sobre todo detrás está algo más que una marca, porque Marichal es más que eso: es una familia que hace vino desde hace más de 80 años y planta viñedos desde hace más de 100. Saben lo que hacen.