El refrán dice que no hay que pedirle peras a los olmos, pero nadie dijo nada de los olivos… Así es que Olivares Salteños planea multiplicar por cinco su producción actual de aceitunas para el 2019. “Nuestros montes son jóvenes, el 80% de los árboles tienen menos de tres años. Este año seguramente cosechemos 400.000 kilos, pero en tres años vamos a estar en los 2.000.000 de kilos”, explicó Franchi.
Con esta mayor producción, el director del olivar ubicado en el kilómetro 498 de la ruta 3 apunta a que el consumo en Uruguay siga creciendo. Según contó, se estima que en el país se están consumiendo unos 400 gramos per cápita por año, mientras que hace cinco años la cantidad era de 250 gramos. La expectativa es lograr que los uruguayos logren niveles de 800 gramos o un kilo. “Estamos lejos de lo que ocurre en muchos países de Europa, en donde están en los 12 kilos por persona”, añadió.
Con estos niveles, Olivares Salteños no quiere descuidar el mercado local, ya que “sin ir a ofertar, la demanda llega igual a través del boca a boca”, pero a su director le gustaría comenzar a exportar el año que viene. “Hemos recibido pedidos desde Estados Unidos, Costa Rica y Brasil, pero no queremos cumplir a medias con los clientes del exterior y tampoco descuidar el mercado interno, en el que venimos duplicando las ventas. De todos modos, en el 2017 podríamos exportar y nos gustaría llegar a Canadá, en donde se paga muy bien el producto de calidad”, dijo Franchi.
Mientras tanto, en el olivar, las cosas vienen bien, según dijo. Todos los días aparecen uruguayos en la planta para comprar los distintos productos, y por lo menos la mitad de los días del mes van turistas. Con el fin de aprovechar este movimiento es que para el 2018 Olivares Salteños quiere tener pronto su propio hotel a un kilómetro de la planta. “Vamos a construir un hotel de campo en una zona muy pintoresca, con un arroyo al fondo y con el olivar a las espaldas. Hay un par de personas trabajando en el proyecto y lo que pedimos es que fuera un hotel muy compatible con todo el entorno, con los olivares, que haya algún viñedo y un lugar de esparcimiento para que la gente se sienta cómoda y en el campo”, finalizó.