En la era de la incertidumbre aparecen los Interim Managers
¿Contratarías para momentos de crisis en tu empresa a un Interim Manager (IM)? Esa pregunta seguramente se la están haciendo muchos empresarios que necesitan puntualmente hacer cambios en su organización, ya sea porque atraviesan una crisis o por qué no, ya que parecen estar de moda, procesos de fusión y adquisición. Esta tendencia no es nueva ya que surgió en los sesenta, no obstante cobra vigencia en la actualidad y puede ser requerido por las empresas en entornos muy variados como situaciones de crisis, desarrollo de proyectos puntuales muy específicos tales como proyectos de IT, e incluso para lanzamiento de nuevos productos para una temporada. “Dependiendo del tipo de cambio y de la profundidad proyectada para el mismo, la actuación de los Interim Manager puede estar comprendida entre un mínimo de tres meses y un máximo de un año” señala el profesor Raúl Prego, del Departamento de Consultoría de Advice. Además del constante apoyo que recibe de parte de la consultora que lo contrata, tener un IM presenta como ventaja ser un costo variable y de última, si no resulta, se puede cambiar por otro sin restricciones contractuales. Los riesgos quizás estén por el lado de “abrirle” tu organización a alguien de afuera. Pero, en la era de la incertidumbre… nadie está seguro de nada.