Nelson Barreto, gerente general del shopping explicó a InfoNegocios que hay dos zonas, Portones Kids para niños de hasta ocho años o 1.30mts de altura y Portones Baby para los niños menores de tres años o que midan menos de 90 cm. En la zona Baby es obligación que al menos uno de los padres o adultos responsables esté presente en el lugar, mientras que en la zona Kids no.
Aquellos padres que decidan dejar a sus hijos en la zona Kids deberán dejar un número de teléfono para que el personal a cargo pueda llamarlos ante cualquier inconveniente, además, el niño queda con una pulsera puesta y con un número para guardar e identificar su calzado.
“La idea la tenía hace años pero nunca teníamos ni el lugar ni el producto adecuado para hacerlo, y hace un año apareció un proveedor español con una propuesta como la que imaginaba”, dijo Barreto acerca del surgimiento del proyecto.
El juego costó US$ 130.000 y fue importado desde España, son 350 metros de juego y tiene tres niveles diferentes que cuentan con túneles, toboganes, redes y escaleras. Al respecto Barreto comentó que, como el juego es tan grande y entran aproximadamente 80 niños, decidieron implementar seis cámaras para aumentar la seguridad de los niños, del personal del shopping y de los padres.
Portones Kids tiene un costo por hora de $220, “creemos que en estos casos hay que cobrar, primero para dar un buen servicio y segundo porque no es solo el entretenimiento sino el cuidado del niño”, explicó Barreto. Las otras formas de pago son mediante el canje de boletas, por compras mayores a $3000 el shopping regala dos horas gratis para un niño, y con Benefits, la tarjeta de beneficios del shopping también se pueden canjear horas de juego.
Según Barreto no esperaban tener una respuesta tan inmediata pero el domingo tuvieron 250 chicos, “siempre tuvimos eso en la cabeza, que el padre disfrute de sus compras, deje al niño y se quede tranquilo de que está cuidado y pasando bien”, señaló el gerente.