Gracias al gran dinamismo que ha tenido el consumo privado en el último tiempo, la economía uruguaya llegará a un crecimiento del 3,2% cuando finalice el 2017, mientras que en 2018 se espera que el nivel se ubique en 3,1%, de acuerdo a un informe de BBVA Research.
La desaceleración de la inflación ha llevado a que los precios hayan bajado levemente, lo que benefició al consumo. Asimismo, la apreciación del tipo de cambio mejoró el poder adquisitivo de las personas, lo que ha influido positivamente en la confianza del consumidor, explicó la economista Haring.
De cualquier manera, la experta aclaró que próximamente el consumo se alineará con la situación actual del mercado laboral: “la tasa de desempleo viene aumentando, en los últimos meses ha tenido cierta estabilidad y creemos que la capacidad de la economía para crear empleo es bastante baja”. Según entienden desde BBVA Research, cuando se calcula la elasticidad, es decir, la variación del desempleo con respecto a la viariación del PIB, el valor es tan solo del 0,3%. “Por eso no creemos que el desempleo vaya a volver a alcanzar mínimos de 5,8% de hace un par de meses, pero tampoco va a aumentar tanto”, indicó la economista.
De esta manera, si bien el consumo privado seguirá siendo positivo para el crecimiento de la economía uruguaya, a fin de cuentas, el factor decisivo terminará siendo la inversión. Para ello, la instalación de la planta de UPM será fundamental.