Impulsada por empresas como FNC, Minerva, Alliance Uruguay, Ciemsa, Coca-Cola Femsa, CSI Ingenieros, Teyma y Saceem, entre otras, la fundación Alianza Uruguaya por el Agua (AUA) presentó, en el marco de la Expo Uruguay Sostenible, los resultados de una encuesta nacional acerca de la percepción de los recursos hídricos en Uruguay, generada en base a la sequía que afectó al país durante 2023 y con el fin de buscar datos respecto a la calidad y disponibilidad del agua.
Entre los principales resultados se destaca el hecho de que el 48% de la población que participó del informe identificó problemas en la calidad del agua potable como principal preocupación, seguido por un 37% que señaló los plásticos en cursos de agua como un problema significativo.
En lo que tiene que ver con el consumo, el informe muestra que en nuestro país el promedio diario de agua que se toma es de 2,46 litros y que 7 de cada 10 personas compran agua embotellada de forma semanal. De hecho, un 53% consume agua embotellada, mientras que el 22% lo hace de la canilla (sin hervir ni filtrar), un 19% de la canilla (con filtro o purificador), un 4% de la canilla y la hierve y el 2% de pozos o aljibes.
En cuanto a la confianza en el agua de la canilla, la cifra varía, con un 47% de los encuestados mostrando confianza en su calidad. Ahora bien, luego de la sequía de 2023, la confianza y el hábito cambiaron: un 37% de la población sustituyó el agua corriente por agua embotellada, un 33% redujo el consumo de agua para fines recreativos, un 15% hizo recambio de electrodomésticos por roturas, un 10% adquirió e instaló filtros o purificadores y el 5% restante hizo otros cambios.
De cara al regreso de La Niña, previsto para la primavera de este año, puede darse otra vez la situación de que las fuentes naturales de agua se sequen. De hecho, según el informe de AUA, el impacto de la sequía en 2023 afectó al 77% de los encuestados de la zona metropolitana consideró que la sequía tuvo un impacto muy relevante. Ahora bien, en el planteo de si debería reducirse el consumo de agua en los hogares, el 62% dice que “no”, mientras un 24% dice “tal vez” y un 14% cree que “sí”.
Sin duda la población percibe que hay problemas de calidad de agua y entonces elige comprar agua embotellada, pero seguramente estas mismas personas hacen esto sin pensar qué tipo de agua está eligiendo no cómo está envasada y menos cómo ha sido ese proceso y si tiene controles.
Mauro de la Vega, director ejecutivo de AUA, dijo que “los encuestados, en su gran mayoría, perciben que los principales problemas sobre el agua que enfrenta Uruguay son la calidad del agua y la cantidad de plásticos en los cursos de agua”, agregando que existen dos grandes grupos, “aquellos que confían en la calidad del agua de la canilla y otros que prefieren el agua embotellada”.
Lo más interesante en esta muestra es que, como dijo el director ejecutivo de AUA, “la gente estaría dispuesta a pagar más para mejorar la calidad del agua y para mejorar los sistemas de drenaje pluvial”, sobre pensando que un evento similar al de 2023 se va a repetir