El cofundador de ChillTravel, Jerónimo Acosta, conversó con InfoNegocios y explicó que el proyecto surge con el fin de solucionar uno de los problemas más comunes que se da a la hora de viajar: la pérdida o el mal manejo del equipaje. Según datos de SITA, uno de los principales especialistas a nivel mundial en TI y comunicaciones del sector aéreo, al año se mal manejan 23.000.000 de valijas en todo el mundo. De esos 23, 1,5 millones de valijas son robadas, 3,5 millones son dañadas o violadas y el resto son demoradas al menos 24 horas. “ChillTravel nace para reinventar la experiencia del pasajero, ese tipo de problemas existe hace más de 60 años en la industria pero como entienden que no es 100% problema de ellos, se desentienden”, comentó Acosta.
El invento es un wrapp protector de valijas, es reciclable e irrompible, cada vez que el usuario quiera sacarlo deberá romperlo con una tijera. Está hecho de material tyvek, de Dupont, y permite no solo proteger el equipaje y sus contenidos, sino que vuelve a la valija inteligente pudiendo acceder, a través del celular, al recorrido que hizo. Cuando la valija se acerque a la persona, le va a llegar una notificación al celular. En el caso de que el usuario detecte algún problema con la locación de su equipaje, va a poder saber en qué avión o aeropuerto está y va a poder notificar a la línea aérea en ese mismo momento. “La ventaja de esto es que apenas la persona se baje del avión va a saber dónde está su equipaje, sin tener que ir a esperar a la cinta y sin tener que ir al mostrador a quejarse con la aerolínea. Es todo mucho más directo”, explicó el cofundador.
Según Acosta, la solución que ellos ofrecen se diferencia de las que existen hasta el momento, ya que tanto las valijas inteligentes (cuyo costo ronda los US$300), el film de los aeropuertos o las fundas tipo camisetas, no protegen del mismo modo el equipaje ni son igual de inteligentes. El costo del wrapp que ofrece ChillTravel aún no está definido, pero según el empresario, el objetivo es que cueste menos de la tercera parte de lo que cuesta actualmente el wrapp tradicional. “Además, vemos una posibilidad en nuestro producto para que las marcas hagan publicidad, ya que la parte externa del wrapp es fácil de imprimir, sería algo así como los típicos parasoles que regalan en verano”, explicó.
La inversión del proyecto, hasta el momento, ha sido por parte de lo que en el ecosistema de las startups se conoce como la triple F: friends, fools and family, es decir, amigos, familiares y gente tonta. “Por ahora todo ha salido de nuestro bolsillo, ANII nos dio US$25.000 que nos vinieron muy bien, pero el principal aporte es nuestro”, apuntó Acosta. Por esa razón, el lanzamiento del proyecto –que se realizará entre octubre y noviembre- se hará bajo la modalidad de campaña de Kickstart, una plataforma reconocida a nivel mundial que permite financiar proyectos a través de preventas. “La campaña Kickstarter tiene tres grandes cometidos: la facturación, el lanzamiento internacional y la validación del negocio”, explicó el empresario.
Si bien es un proyecto que está incubado en Uruguay, no es un proyecto únicamente para este país y la región, sino que tiene un foco global. “Esto nace acá pero es un proyecto que mira al mundo entero, es internacional y así lo vamos a encarar”, manifestó Acosta.
El equipo de ChillTravel está dividido en tres grandes áreas: tecnología, diseño y comercial. “Nuestro equipo es pieza fundamental de este proyecto porque es multidisciplinario, todos los que trabajan fueron elegidos por un motivo, no fue casualidad”, concluyó el emprendedor.