Con la compra de un pan dulce o un budín inglés artesanal, que debe estar debidamente identificado con el sticker de la campaña, el Centro de Panaderos del Uruguay, institución fundada en 1887 y que actualmente está integrada por alrededor de 1.500 panaderías en todo el país, donará $ 10 a la Fundación Pérez Scremini, teniendo como objetivo superar los $ 200.000 recaudados en 2019 cuando se realizó la primera edición de Pan Dulce Solidario.
Según Álvaro Pena, presidente del Centro de Panaderos del Uruguay, “tras el éxito de la primera edición y apelando al espíritu solidario de los uruguayos, volvemos a lanzar la campaña Pan Dulce Solidario con el objetivo de colaborar con la Pérez Scremini en su noble tarea de curar el cáncer infantil”.
Pena remarcó el hecho de que tanto el pan dulce como los budines ingleses que se elaboran para la campaña -que arrancó el pasado 1º de diciembre y cuenta con más de 100 puntos de venta en todo el país- son preparados artesanalmente en las panaderías de barrio, con un auténtico amasado cuyo origen es italiano y tiene cinco siglos.
“Desde el Centro de Panaderos del Uruguay buscamos revalorizar la panadería artesanal debido a la calidad de sus productos y la materia prima con las que son elaborados”, sostuvo Pena, agregando que “este es el gran diferencial de las panaderías artesanales”.
“Como parte de la acción -dijo Pena- estamos invitando a todos los uruguayos a recomendar su pan dulce y panadería de barrio preferidos a través de las redes sociales bajo el hashtag #PanDulceSolidario”.
Sin duda que lo vale, tu mesa de Navidad tendrá algo muy rico y tradicional y los niños de la Fundación Pérez Scremini seguirán enseñándonos a que nunca hay que bajar la guardia ni rendirse.