Si bien la rotación es baja, las empresas comienzan a preocuparse por la retención de sus talentos
Javier: “El constante cambio de empleados representa un verdadero problema. Entrenar debidamente a un empleado implica invertir tiempo y dinero, y durante lo que dura, el trabajador no es productivo en un 100% por lo que el costo resulta elevado. Cuando un empleado renuncia (o es despedido), es necesario iniciar un nuevo proceso de reclutamiento/entrenamiento, y ‘vuelta la muela a doler’. Frente a esto, ¿no será conveniente por parte del empleador –al menos- evaluar una mejora en la retribución y no ‘abrirle la puerta’ para que se vaya?... opino que una política de estabilidad laboral es lo menos costoso para las estructuras… saludos”
Nota completa y comentarios aquí.
Tu opinión enriquece este artículo: