InfoNegocios conversó con Carlos Núñez, supervisor del Departamento Agronómico del BSE, quien destacó lo innovador del seguro ya que en Uruguay no existía hasta el momento una cobertura bajo esta modalidad. El seguro se podía contratar hasta el 20 de diciembre, según Núñez, a pesar del poco tiempo que tuvieron para comercializarlo, la cantidad de hectáreas que lograron asegurar están dentro de las esperadas. “Salimos a explicar cómo funcionaba y en qué consistía, entonces básicamente tuvimos solo 20 días para comercializarlo, si se toma en cuenta eso logramos un buen número de hectáreas aseguradas”, señaló Núñez.
Lo que se toma en cuenta como índice es el porcentaje disponible de agua en el suelo, esa información es de carácter público y la proporciona el Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIA). Por esta razón el índice dispara la cobertura sin la necesidad de inspección por parte del BSE, ya que tanto el Banco como los productores cuentan con la misma información. “No necesitamos que el productor nos informe sobre la situación, como ocurre con un seguro tradicional porque ya sabemos cuál es el porcentaje de agua disponible”, explicó el supervisor.
El BSE toma en cuenta un déficit de porcentaje de agua disponible inferior al 20% de capacidad, si esa condición del 20% se da durante dos períodos corridos, (dentro de los 40 días que corre el seguro), se produce una indemnización automática. Si se diera durante tres períodos corridos, se produce una indemnización mayor que alcanza al 50% del capital asegurado.
Los costos del seguro varían según el departamento, Núñez explicó que dividieron a Uruguay en dos zonas. El cálculo que realizaron fue a partir de los datos del clima de los últimos diez años de cada departamento y de la frecuencia de ocurrencia de los eventos. La zona que incluye a los departamentos de Paysandú, Río Negro, Soriano y Flores, tienen una tasa del 2,10%, mientras que en el resto de los departamentos la tasa es de 2,40%. “En algunos departamentos la probabilidad de ocurrencia de un evento como el que estamos asegurando es mayor, por eso el costo es más alto”, explicó Núñez y recordó que a ese costo hay que agregarle además el precio del seguro de granizo (el seguro de índice para sequía de soja es un seguro adicional al del granizo). Por lo tanto, en un departamento como el de Soriano, si se aseguran US$600 por hectárea, el costo para el productor es de US$12,6 por hectárea, sumado luego al valor del seguro del granizo que normalmente cuesta US$15,40. “Por US$28 tenés un seguro normal de granizo y adicional de índice para sequía, ese es uno de los valores más alto, hay que tener en cuenta que varía según la zona”, explicó el ingeniero.
En cuanto a las expectativas para este 2017, Núñez comentó que esperan captar el 100% del área de cultivos de soja del país. “Ese es el objetivo que tenemos, aunque por supuesto hay que asumir que el productor se va a comportar de acuerdo a lo que dicte el pronóstico del tiempo”, concluyó Núñez.
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