¿Qué le podemos vender a Brasil para el 2014 y 2016?

Muchos exportadores deben estar sacando cuentas de lo que va a representar en el 2014 y 2016 la realización en Brasil, respectivamente del Mundial de Fútbol y de los Juegos Olímpicos. Según se estima, el impacto final de los juegos olímpicos en la economía brasileña podría superar los U$S 51.000 millones. Y en ese contexto, hay quienes aseguran que más del 40% de las exportaciones a Brasil podrían beneficiarse. En Atenas 2004 el proyecto inicial contempló inversiones por U$S 1.600 millones, pero al final el gasto fue de U$S 16.000 millones. Para Beijing 2008 también se estimaron U$S 1.600 millones cuando se designó la sede y las estimaciones actuales indican que el costo final estuvo entre los U$S 30.000 y los U$S 40.000 millones. Las expectativas de gastos para Londres 2012 se ubicaron al principio en los U$S 5.000 millones, pero ahora el proyecto estima un costo final de U$S 19.000 millones. ¿Qué sectores productivos podrían verse relacionados con este negocio adicional? Se nos ocurren algunos: autopartes, plásticos, papel y cartón, productos químicos, cebada, rubros que ya representan gran parte de las exportaciones a Brasil que entre enero y setiembre sumaron US$ 800 millones. ¿Qué otros sectores te parece que ya deben estar mirando hacia el norte?

Con pasta de campeón (hay lugar en el podio para el uruguayo Joaquín Cafaro)

En el último tiempo el automovilismo volvió a ganar protagonismo en el Río de la Plata. Por un lado, en la vecina orilla, todos hablan de Franco Colapinto y, por otro, en las pantallas de todos los hogares, de Argentina y Uruguay, la miniserie de Netflix que retrata la vida de Ayrton Senna es la N° 1 más vista. En medio de eso, un piloto uruguayo –de 19 años– que compite en Argentina, Joaquín Cafaro, fue reconocido como el mejor debutante de 2024. InfoNegocios dialogó con este conductor de carreras que pisa fuerte el acelerador.

Hacia una gastronomía más sostenible

(In Content) Alsea, operador líder de restaurantes en América Latina y Europa, avanza en su compromiso con la sostenibilidad a través de iniciativas ambientales y sociales que impactan positivamente a las comunidades y promueven un futuro más responsable para la gastronomía.