Las empresas del Estado tienen que competir con los privados

Carlos: "¡¡¡Hola gente!!! Buenísimo, he leído con mucha atención los comentarios. En primer lugar no estamos descubriendo nada nuevo, pero hay un problema y diagramar líneas de acción como ustedes lo "ven" no es tan fácil arriarlo. Pero es un buen comienzo visualizarlo y tomar conciencia y una postura activa y no pasiva que es lo que nos han acostumbrado. Si es verdad que esta situación no es de este siglo ni mucho menos. Pero ya entre nosotros tenemos algunas soluciones, o sea que se puede cambiar la metodología de trabajo, redistribuir personal, sacar cargos que son obsoletos, tienen tantos beneficios que no se si son empleados públicos o de la NASA. Pero sabemos que en todo esto hay intereses creados. No importa el color del gobierno, sino si en realidad quiere meterse en esa bola de nieve. Porque como la dimensión del tema es tan compleja que incluso los gobiernos están atados (ojo no se coman "que tenemos la buena voluntad, etc, etc...") porque de buena voluntad está llena el camino al infierno. Creo que antes un plebiscito, antes hay que hacer conciencia más aún, eso tampoco nos va dar una seguridad de nada pero como dije es un comienzo. El estado trabaja y exige al privado más de lo que hace pero no lo veo mal, pero tampoco que se regalen las "cosas". Si un privado no cumple con lo acordado no pierde el privado o el Estado (repercute en la gente). Un ejemplo absurdo si se quiere pero es visible día a día, el tema de la basura. Mugre por doquier, privados paralizados y públicos que ahora se suman (¿el gobierno los contrata por un servicio? ADEOM en contra y ahora le sirve acaballar con el caballo del "vecino"). Bueno no quiero ser aburrido, la idea es aportar en positivo con errores. Y bueno los interesados que quieran continuar, un abrazo".

Sumate al debate ingrando aquí.

Del gancho de la carnicería al freezer de tu casa (Frigorífico Paysandú consolidó la venta de ½ res)

En diciembre del año pasado abrieron Carnicería Frigorífico Paysandú, pero no era una carnicería cualquiera, sino una que vino a patear el modelo tradicional del negocio. Bruno Zuluaga y Jorge Etcheberry trajeron a Montevideo una propuesta innovadora: vender a un mismo precio de kilo toda una media res, con el desposte tradicional de los distintos cortes o bien a elección del cliente. Para ver cómo funcionó este nuevo esquema de venta de carne en InfoNegocios dialogamos con uno de sus socios propietarios.