Una de nuestras lectoras nos envió un video ayer a la tarde que mostraba que en el interior de Montevideo Shopping había banderas y un grupo de gente agolpada sobre la puerta interna de Tienda Inglesa. A su vez, se escuchaban bombos, silbatos y cánticos. Fuimos hasta el lugar y pudimos comprobar que se trataba de una acción sindical llevada adelante por la Federación Uruguaya de Empleados de Comercio y Servicios (Fuecys).
El supermercado había sido ocupado: las puertas estaban cerradas y bloqueadas con carros, y había sindicalistas aplaudiendo y silbando. Algunos entregaban volantes, los cuales explicaban que la lucha es por salarios de $ 20.000 sin presentismo.
Si bien esta acción fue llevada adelante frente a Tienda Inglesa en particular, había integrantes de los sindicatos de todos los supermercados en el lugar, ya que la situación aplica para todos. Graciela Cuello, delegada del gremio de El Dorado y quien además forma parte de la mesa de negociación, nos contó que la patronal ofreció un convenio a 30 meses, cuando los trabajadores buscaban uno a dos años. “Además, el correctivo que ellos comentaban podría ser al año, hoy (por ayer) lo pasaron a 18 meses y que los $ 20.000 entrarían a partir del 1 de enero de 2017 con el presentismo incluido. Nosotros queremos sin presentismo ahora y ya”, expresó. Según la trabajadora, la Cámara de Comercio no está en problemas, a pesar de lo que dicen sus integrantes: “en el caso de El Dorado van a inaugurar dos sucursales nuevas y reformar otras dos. Eso demuestra progreso, no están perdiendo”, dijo Cuello.
Por su parte, el secretario General del sindicato de Tienda Inglesa, Ariel Britos —quien también es secretario de Salud, Seguridad e Higiene Laboral de Fuecys —nos comentó que en el caso particular del supermercado vendido por Robin Henderson, hoy en día un cuarto de los trabajadores ganan menos de $ 15.000.
Al consultarle si la reciente venta de Tienda Inglesa tuvo algo que ver, el sindicalista explicó que si bien la cuestión ya venía de antes, el hecho de que el dueño actual no sea uruguayo hace que “la gente se ponga nerviosa”. “Más allá de que tenemos acuerdos, recién empezamos a trabajar con esta empresa y los trabajadores queremos reclamar por los salarios sumergidos. Va a ser difícil de llegar a un acuerdo y va a haber más medidas en el medio. Es muy difícil que hoy por hoy nos digan que sí a lo que pretendemos”, finalizó.