La cifra se alinea con la tendencia global, donde se concretaron más de 25.000 operaciones por un total de US$ 1,7 trillones, un 10% más en valor respecto al mismo período de 2024, aunque con una caída del 13% en el número de transacciones.
El sector de tecnología y telecomunicaciones lideró tanto a nivel global como local. En Uruguay, la mitad de las operaciones correspondieron a este rubro, seguido por movimientos en finanzas, agroindustria, energía y logística.
Para Magdalena Perutti, socia de KPMG Uruguay, el dinamismo del mercado local no muestra signos de enlentecimiento. “El crecimiento inorgánico a través de operaciones de M&A ya es una estrategia muy consolidada en el mercado uruguayo y en diversas industrias. No vemos señales de enlentecimiento en esta tendencia; por el contrario, las compañías continúan incorporando el M&A como parte estructural de sus planes estratégicos de expansión”, explicó.
En este contexto, se observa un predominio de compradores estratégicos por sobre los financieros, lo que, según Perutti, refleja “un interés genuino en consolidar operaciones y expandir capacidades”, indicó.
En ese sentido, el atractivo de Uruguay se apoya en su estabilidad política y económica y en reglas de juego claras. Factores externos, como la baja de tasas de interés o mejores condiciones frente a otros mercados, podrían darle aún más impulso a las operaciones.
Consultada sobre los desafíos externos, Perutti señaló que “lo que ocurre en términos de comercio exterior, conflictos geopolíticos y políticas monetarias internacionales puede alterar significativamente la dinámica de los negocios. Las tasas de interés, aunque en proceso de moderación, siguen afectando el costo del financiamiento y la valoración de activos, lo que puede ralentizar o encarecer las operaciones”, aseguró.
También mencionó las fluctuaciones cambiarias, como la apreciación del dólar, que pueden impactar en la competitividad de los activos locales. Sin embargo, proyecta que un recorte en las tasas internacionales podría “originar un impulso en la actividad de M&A, al generar condiciones más favorables para el financiamiento y estimular el apetito inversor”, puntualizó.
Por otra parte, el sector tecnológico continúa siendo el más dinámico, ya que “las empresas de software, fintech y soluciones digitales son especialmente atractivas tanto para inversores locales como internacionales”, aseguró Perutti.
Además, resaltó la agroindustria como motor de crecimiento por su capacidad exportadora, junto con oportunidades en infraestructura, energía, finanzas, retail y turismo.
En los últimos años, KPMG participó en más de 150 operaciones en Uruguay. De esa experiencia, Perutti afirmó que “es fundamental la preparación de las empresas antes de salir al mercado”.
Por lo tanto, dijo: “Cuando un comprador se acerca a una empresa, lo hace atraído por su modelo de negocio, su talento o su clientela, pero la operación exige una revisión integral. Cuanto más preparada esté la empresa, más fluido será el proceso de due diligence y mejor será la percepción del comprador sobre la calidad y madurez de la organización”, manifestó.
Como cierre, mencionó que de cara al segundo semestre de 2025 y a 2026, KPMG espera un aumento en las operaciones, impulsado por un contexto global de tasas de interés en descenso y en el regreso de interés de los inversionistas.