La consultora KPMG junto al Centro de Empresas Familiares (CEF) de la Cámara de Comercio y Servicios del Uruguay (CCSUY) lanzó la segunda edición de su Encuesta de Empresas Familiares.
Las empresas familiares- definidas cómo aquellas que se encuentran gestionadas por familias cuyo sustento económico proviene principalmente del desarrollo de dicha actividad- tienen un importante rol en el ecosistema empresarial de Uruguay.
Con el nombre Retratos de Familia, la encuesta apunta a relevar el perfil de las distintas empresas en el Uruguay, caracterización, desafíos, convivencia de varias generaciones, sucesiones y planes de expansión. De acuerdo con estimaciones del CEF, las empresas familiares tienen una representación del 80% en el ecosistema empresarial Uruguay.
En la primera edición de la encuesta, presentada en 2022, 64 empresas de esta categoría identificaron la trayectoria como factor distintivo: el 80% tiene más de 15 años operando y una expectativa mayoritaria de continuar funcionando como empresa familiar.
Los principales datos del primer estudio dan cuenta de que el 78% de estas entidades son “Pequeñas Empresas” o “Medianas Empresas” y predomina mayoritariamente el sector importación y venta de productos industriales (24%), tales como bienes para la construcción, materiales eléctricos, pinturas y otros artículos de barraca y ferretería.
Italo Elola, Director de Asesoramiento de Negocios de KPMG Uruguay, remarcó que, si bien el primer estudio abarca a un número pequeño de empresas considerando la cantidad que hay en Uruguay, esta es “la primera vez que se hace un estudio de este tipo en Uruguay”.
En ese sentido, expresó que es importante poder llegar a la mayor cantidad de empresas posibles con la nueva edición de la encuesta.
“Considerando la relevancia de las empresas familiares en el ecosistema empresarial uruguayo, así como en nuestro entramado social, tenemos la expectativa de que esta segunda encuesta nos brinde más y mejor información sobre las dinámicas exclusivas que ocurren en estas empresas, de manera de poder seguir aportando a una mayor visibilidad de sus características, desafíos y aportes de valor a nuestra comunidad”, expresó Elola.
Por su parte, Verónica Balestero, Coordinadora General del Centro de Empresas Familiares, sostuvo que “un gran desafío para estas empresas es el aprender a trabajar conviviendo con aquellos que también lo hacemos en casa”.
“Es importante que se trabaje en identificar la complementariedad en el ámbito laboral y se pueda comenzar un proceso de identificarse y actuar como una familia empresaria. En este marco, definir claramente algunos acuerdos que les permitan un marco de acción y, por, sobre todo, conocer las miradas de cada uno con respecto a ciertos temas de empresa para cuidar los lazos de amor que los unen como familia”, agregó.