Uruguayos orgullosos y argentinos con cierta envidia

A pesar de ciertas desprolijidades al ingreso sobre todo en lo que respecta a las acreditaciones, finalmente todo el mundo se fue conforme del Conrad luego del almuerzo con el presidente electo. Mujica dio un discurso que los empresarios querían escuchar lo que fue interpretado como un compromiso con el respeto a las inversiones. La mayoría de los empresarios y todos con los que pudimos hablar coincidieron en que el evento fue un ejemplo que dio el Uruguay a la región y el mundo. Muchos lo vieron “gratamente” más pegado a Lula que a Chávez y los argentinos, como el presidente de la Unión Industrial Argentina Héctor Méndez, admitieron cierta “envidia”. El empresario mediático argentino Daniel Hadad ("me considero medio uruguayo y vivo acá 100 días al año") comentó que el evento fue una muestra de la apertura del Uruguay a las inversiones. “La etapa Mujica nos hace pensar en muy buenos años para la economía uruguaya” dijo. Nicolás Jodal, vicepresidente de Artech, se sintió “orgulloso de ser uruguayo” y destacó la importancia que le dio Mujica a la diversidad y a la tolerancia, dos valores muy importantes del Uruguay. Para el abogado Daniel Ferrere la impresión general es que fue un excelentísimo discurso “muy bien dimensionado para la oportunidad y técnicamente muy bien hecho”. Gabriel Rozman, ex presidente de TCS Latinoamérica, reconoció que el discurso transmitió “mucha pasión y amor por el Uruguay” lo que calificó como un triunfo del presidente electo.