El interés por explicar la necesidad de una buena siesta, llegó incluso a un grupo de investigadores de la Universidad de Harvard, que decidió encarar un estudio que consistía en el seguimiento durante seis años a cerca de 24 mil personas. Descubrieron que aquellos que dormían la siesta por lo menos tres veces a la semana durante al menos media hora, tenían un 37% menos de riesgo de mortalidad por enfermedad coronaria que aquellos que no dormían la siesta. Se observó un mayor efecto protector de la siesta especialmente entre los hombres que trabajaban. Los autores del estudio explican que la razón de estos resultados se podría deber a la siesta como un “liberador de tensión”, ya que se sabe que el estrés está muy relacionado con los problemas cardíacos de origen coronario. ¿Cuánto hace que no tomás una buena siesta?
¿Cuánto hace que no tomás una “siesta”?... tres veces por semana (al menos) libera tensiones
Quizás en Montevideo se haya perdido el hábito pero en el interior sigue siendo un clásico: la siesta, ese momento de reposo, generalmente después del almuerzo, donde reponer energías, “partir” el día en dos, y continuar con las tareas. Entre los antiguos romanos le llamaban la “sexta hora” y sigue siendo una práctica habitual en China, España o Israel. Los expertos dicen que existe una predisposición general en el ritmo circadiano de los humanos a cansarse y tener sueño 8 horas después de levantarse, entre el mediodía y la tarde. Lo hemos visto en legisladores, políticos, empresarios, que durante una larga jornada, aprovechan para “echarse un sueñito” incluso en público.
Para leer la nota completa y opinar hacé clic en el título
Tu opinión enriquece este artículo: