Guillermo Gonzalez:

“Como trabajador joven que ocupa un mando medio veo que es difícil ganar un lugar propio teniendo que competir con personas que llevan muchos años trabajando en la empresa y no ven con buenos ojos la competencia de los más jóvenes. Es difícil conseguir esos espacios. En ese sentido, en lo personal no me puedo quejar de mis jefes porque gradualmente me han permitido crecer, realizar tareas diferentes a las que hacía cuando empecé, y asumir responsabilidades. Siendo un trabajador joven, considero que la confianza que depositan los mayores en uno es muy importante".