Eva Vaz, Tercera planta
“Sube a mi habitación, amor,
sabes que allí está la verdad.
Una mujer y un hombre
que comparten mucho más
que el miedo a la muerte.
Sube a mi habitación, amor,
no sea que la muerte se acerque
y nos coja
rezándole a otro Dios.
Un hombre encuentra
a una mujer desnuda
sobre la cama.
Ven aquí, amor,
vamos a matarnos de mentira”.
El blog de Emma Gunst.
Tu opinión enriquece este artículo: