Mayra Oyuela, III
Habrá que decirse muy en el fondo
y para adentro:
la palabra amor debería de ser eliminada
de los alfabetos,
que los libres de culpa levanten la mano
y me apuñalen.
No hay buenos, ni malos,
ni izquierdos ni derechos
porque a la hora de matar por amor
todos somos ambidiestros;
por eso al diablo con la política,
al diablo con el amor
al diablo la poesía,
al diablo con el corazón y sus anginas de pecho.
Todo dolor es pan,
todo perdón es dolor.
Habrá que llamar las cosas por su nombre
al pan, pan
y al amor
¡ay! morir de amor
pero nunca poder matarlo.
El blog de Emma Gunst.
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