Hoy por hoy, estos dispositivos no solo son muy versátiles, sino que además son una moda. Pero, en este caso, la moda puede incomodar a la concentración a la hora de manejar.
Según un estudio realizado en Estados Unidos por la AAA Foundation for Traffic Safety — en Suiza y Alemania también se han hecho sonar algunas alarmas sobre el tema—, la pantalla táctil provoca distracciones visuales, mentales y físicas que son potencialmente peligrosas. Esto significa que a la ya reconocida distracción del celular —que aunque muchos sigan creyendo que nada ocurrirá, lo cierto es que las distracciones son las principales causas de accidentes de tránsito—, se le suma la pantalla multimedia con sistema táctil a los autos, los cuales por más que en su mayoría cuentan con comandos en el volante para su accionar, y hasta pueden ser controlados por voz, hay funciones que son solo aplicables manualmente.
“Vanguardia vintage”, todo indica que vamos hacia una nueva era de pantallas, en las que existen comandos claves que generan referencia intuitiva. Este último punto es clave: en la pantalla táctil uno utiliza un “botón” para varias funciones, pero no se tiene referencia física de este. Es la misma pantalla lisa sin relieves, por lo que se debe mirar cuál es el comando que se debe pulsar. Esto implica que se debe distraer la vista por un instante hacia a la pantalla.
Este tema ya está en la mesa de debate de algunas de las instituciones gubernamentales más importantes del mundo, así como también en los escritorios de las principales marcas que diseñan y producen vehículos. Se podrá estar más o menos de acuerdo, pero la realidad es que existe una gran razón como para seguir estudiando el tema y avanzar en soluciones prácticas que hagan al conductor más preciso y con menos distracciones —más allá que está en cada uno el proceder frente al volante—.