El presidente de la Administración Nacional de Puertos (ANP), Alberto Díaz, reconoció que la ley que promulgó el gobierno de Cristina Fernández en junio de 2014 fue un golpe duro para el Sistema Nacional de Puertos y repercutió fundamentalmente en los ingresos de las empresas privadas que operan dentro del puerto de Montevideo. El golpe fue menor para la caja de la ANP debido a que las operaciones no eran de alto valor.
Según nos comentó Díaz, la carga paraguaya logró sanar esas heridas y mitigó el impacto de la ausencia argentina durante 2015.
Pero ahora, con el gobierno del vecino país como aliado, la estabilidad se transformó en crecimiento. “Fue muy bienvenido el cambio de gobierno en Argentina, su tercer acto de gobierno fue derogar esa ley”, resaltó Díaz.
El presidente de la ANP confirmó que al día de hoy las líneas navieras regulares se reestablecieron y señaló que aún así se debe “crecer en el mercado” para conservarlas y sumarles nuevas.
“Se nota que la actividad está subiendo”, indicó Díaz y resaltó que en los primeros seis meses del año hubo un crecimiento en el movimiento de la actividad portuaria.
“No creció la importación ni la exportación, crecieron los trasbordos”, remarcó y apuntó que dicha carga argentina representa un 8% del total de los movimientos del puerto de Montevideo.
Finalmente, el presidente de la ANP señaló que en 2011 se dio un récord en el que se movieron unos 860.000 teus —con un muelle menos, porque aún no estaba construido el muelle C —y para 2016 se espera que la cifra se acerque a ese número.
“Nuestra aspiración es volver a mover lo que movíamos en 2011 como primera meta”, dijo Díaz, y concluyó que la infraestructura actual permite cumplir con este objetivo y aspirar a más.