El próximo lunes y martes habrá paro de las estaciones de servicio en respuesta al nuevo sistema de distribución que propuso Ancap para recortar gastos. La medida (que comenzará a las 0:00 horas del lunes hasta las 24:00 del martes), es solo para la venta de combustible al público, tanto las ambulancias, los bomberos, como la policía podrán recargar.
El cambio que Ancap plantea, y que esperan que comience a regir a partir del próximo año, propone recortar los costos (el 10%) en la distribución del combustible que, según la ministra de Industria, Energía y Minería, Carolina Cosse, rondan los US$ 320.000.000.
Según la Unión de Vendedores de Nafta (Unvenu), los estacioneros de servicio están desde hace años reclamando una modificación en la paramétrica de bonificaciones (cantidad de pesos que Ancap paga por cada litro vendido), para poder incrementar el margen de ganancia de los estacioneros, dado que no se tenían en cuenta los costos reales de comerciantes. Esto no solo no ocurrió, sino que además en el 2013, Ancap cambió la paramétrica sin tener en cuenta el ajuste salarial de julio, lo que llevó al aumento de los costos de los estacioneros, y la situación empeoró aún más cuando en julio de este año decidieron congelar la paramétrica.
La ministra Cosse explicó a InfoNegocios que lo que ellos plantean es una estructura de franjas, es decir que Ancap va a bajar la bonificación de las estaciones de servicio más grandes o de aquellas que más vendan, pero la de las más pequeñas o quedará como está o aumentará, según el caso. “Estamos hablando de mantener la equidad y es una medida que tenemos que tomar para emprolijar a Ancap”, señaló.
En cuanto a esto, el secretario de la Unvenu, Jorge Bonino nos dijo que Ancap tomó la medida de forma unilateral y que la única vez que la ministra los recibió (luego de varias reuniones canceladas) fue por pedido expreso del presidente Vázquez. “En ningún momento fue una negociación, solo nos dijeron lo que habían decidido”, comentó.
Para varios estacioneros de servicio, de la capital y del interior, esta medida implica un castigo a aquellos empresarios que quieren mejorar e invertir en su negocio. “Acá el único objetivo de ellos es solucionar el problema económico de Ancap, es una forma fácil de hacer dinero para tratar de mejorar sus balances”, concluyó el secretario de la Unvenu.
Desde la gremial de los estacioneros advirtieron, además, que muchas estaciones cerrarán si prospera este cambio de modelo de distribución propuesto por Ancap y que, la única manera de que la estación de servicio siga siendo un negocio rentable es si se eliminan puestos de trabajo. En respuesta a esto Cosse dijo: “esto no implica el cierre de ningún negocio, si cierra alguno no es por este motivo”.
El contrato que las estaciones de servicio tienen con las distribuidoras vence el 8 de diciembre y el nuevo sistema se aplicaría (por ahora) a partir del 1 de enero.