El hecho de que el tiempo en casa se ha extendido, ha impactado de manera distinta en muchos rubros. En el caso de los libros, cambió la tendencia en las temáticas que más se buscan y, en muchos casos, también permitió devolver un hábito que algunos habían perdido. “Hay de todo un poco. Hay gente que ha leído más en la pandemia, porque pasa más tiempo en casa, pero también hay gente que tuvo menos medios para comprar libros”, explica Castillo.
La Librería Puro Verso, en la esquina de 18 de Julio y Cuareim, en pleno Centro de Montevideo, logró recuperar sus ventas luego de los dos meses de 2020 del confinamiento más estricto. “La pandemia nos agarró justo cuando estábamos desarrollando la web para vender por el canal digital. Tuvimos que apurarla y logramos salir en junio. Parte de las ventas que se habían perdido en el salón se recuperaron a través de ese canal. Nos sirvió también para llegar al interior del país donde antes no estábamos”, asegura Juan Castillo. Por allí se canalizan alrededor del 30% del total de las ventas.
Larga vida a los libros
“Pienso que el soporte del libro es bueno y que va a perdurar un buen tiempo más, pese a la fuerte irrupción de la tecnología. No creo que vaya a pasar como con la música, que ahora prácticamente solo existe por la vía digital. La gente joven lee. De hecho, el segmento de la literatura juvenil es muy fuerte. También se compran muchos libros para niños, aunque no sabemos si serán futuros lectores”, reflexiona el librero.
En cuanto a los precios, lo nacional no ha sufrido grandes variaciones, pero lo importado sí. “Muchos títulos que se venden en Uruguay son de editoriales europeas o argentinas. Los costos en relación a los anteriores a la pandemia, han aumentado por encima de la inflación, alrededor de un 20%”, asegura Castillo.
Los libros más solicitados, en formato común, importados, están entre los US$ 15 y US$ 20, mientras que los nacionales, van de los US$ 12 a US$ 15.
La Librería Puro Verso cuenta entre sus estanterías con unos 100.000 ejemplares diferentes.