Según el empresario, el mercado inmobiliario en Uruguay ha mostrado una notable dinámica en el último año, impulsada por un incremento en los salarios reales y un crecimiento del empleo. De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística (INE), en 2023 se llevaron a cabo más de 50,200 operaciones de compraventa de inmuebles, marcando un récord histórico. Además, los precios de los inmuebles, medidos en dólares, aumentaron un promedio del 9% anual.
Desde la implementación de la Ley de Vivienda Promovida en 2011, se han desarrollado un total de 1,375 proyectos que han resultado en la construcción de 35,290 viviendas y 16,470 garajes, con una inversión total de 3,500 millones de dólares. Montevideo ha sido el principal beneficiario de esta ley, con un 78.25% de las viviendas construidas ubicadas en la capital.
En este contexto, la desarrolladora Vitrium Capital ha sido un actor destacado. La empresa inició sus operaciones en Uruguay hace más de ocho años y está próxima a completar su séptimo proyecto en el barrio La Blanqueada, el cual finalizará en 2026 con la entrega de 179 departamentos.
Montevideo se presenta como una alternativa atractiva tanto para inversores locales como extranjeros, ofreciendo buenas oportunidades de renta en dólares y opciones accesibles para quienes buscan adquirir su primera vivienda. Según datos de la Agencia Nacional de Vivienda (ANV) de fines de 2023, el precio medio de venta de departamentos en Montevideo es de 2,377 dólares por metro cuadrado, un 12% superior al registrado el año anterior.
El crecimiento sostenido del mercado inmobiliario en Montevideo se ha visto favorecido por la evolución económica del país y por políticas públicas que han fomentado la inversión extranjera y el turismo desde 2010. La Ley de Vivienda Promovida ha jugado un papel crucial, ofreciendo beneficios fiscales a inversores interesados en el mercado local.
Para cerrar, explicó que Vitrium Capital lanzó su séptimo proyecto en junio del año pasado, enfocándose no solo en aumentar la cantidad de viviendas, sino también en promover un estilo de vida sustentable y tecnológicamente avanzado. Este enfoque busca atraer a un segmento de clase media joven que valora la inversión a mediano y largo plazo.