Cada empresario que quiso ir a escuchar a José Mujica pudo hacerlo, pero… debía pagar US$ 1.000 para poder asistir. Hubo 30 mesas con mantelería color marfil, una entrada de jamón crudo con ensalada fresca. El salón desbordaba de empresarios que habían abonado para ayudar a recaudar fondos para la campaña electoral.
Entre los 300 empresarios, el sector que lidera Mujica logró recaudar US$ 300.000 que serán volcados para que el Frente Amplio vuelva a ganar las elecciones por cuarta vez.
Dentro del salón se pudo identificar a varios empresarios reconocidos, el presidente de una de las principales empresas de cobranzas y pagos, directivos de una de las compañías más grandes de transporte urbano y también del transporte de carga.
El expresidente afirmó que si el Estado no empieza a crecer a la par de las grandes empresas “las multinacionales se quedarán con todo” y los uruguayos terminarán siendo “peones trabajando para ellas”.
Este almuerzo generó debate en las redes sociales por los comentarios de Mujica sobre “aflojar los impuestos”, y el llamado a los presentes a invertir en Uruguay para rescatar al país.