KPMG presentó los resultados de la tercera edición de la encuesta nacional “Retratos de Familia en Uruguay”, realizada junto con el Centro de Empresas Familiares, trabajo que busca relevar de forma periódica información clave sobre las características, fortalezas y preocupaciones de las empresas familiares en el país.
El estudio evidencia avances en sostenibilidad y equidad de género: el desconocimiento sobre temas como Agenda 2030 u ODS se redujo casi a la mitad respecto de 2023, mientras que el 87% ya implementa acciones vinculadas a gestión ambiental o capacitación.
Por otra parte, 8 de cada 10 empresas familiares cuentan con mujeres en cargos directivos o gerenciales, consolidando una tendencia de mayor participación femenina en los negocios.
En esta edición participaron 116 empresas de distintos sectores y departamentos, lo que implicó un aumento del 21% respecto a 2023 y más de 80% respecto a la primera encuesta en 2021. Ocho de cada diez compañías son propiedad de una sola familia y en el 77% de los casos el liderazgo está en manos de la primera o segunda generación.
Ítalo Elola, director de Asesoramiento Gerencial de KPMG, destacó que “las empresas familiares siguen siendo un motor central del crecimiento del país y esta tercera edición de la encuesta nos permite entender mejor sus dinámicas, preocupaciones y oportunidades para fortalecer su continuidad y profesionalización”.
Perspectivas
Los resultados reflejan un escenario de fuerte optimismo: siete de cada diez empresas se declaran confiadas en el futuro y la mayoría reporta haber mantenido o aumentado facturación, empleo y rentabilidad en los últimos meses. Sin embargo, solo el 31% cuenta con un plan estratégico formalizado para los próximos años.
En materia de gobierno corporativo y sucesión, la encuesta muestra avances: 9 de cada 10 consideran clave la preparación de los sucesores y casi la mitad afirma estar trabajando en su formación, el mayor nivel registrado hasta el momento. A su vez, 45% de las familias empresarias realiza reuniones regulares sobre el negocio, consolidando prácticas de gobernanza informal que resultan decisivas para la continuidad.
Las principales preocupaciones identificadas con relación al negocio giran en torno al aumento de costos laborales, la necesidad de innovación y la sucesión de la gestión. En cuanto a fortalezas, la atención al cliente se mantiene como el rasgo más valorado, seguido por la flexibilidad en la toma de decisiones y la transmisión de valores familiares.
Por otro lado, en lo que refiere a las preocupaciones centrales con relación a la familia, se encuentran aspectos como la sucesión de la gestión 40%, las diferencias en las expectativas dentro de la familia respecto de la empresa 38% y el interés de la siguiente generación en la empresa en un 31%.