“Arrancamos haciendo redes sociales con un palo de publicidad tradicional, mucho concepto y diseño gráfico. Yo era redactor y mi socio diseñador y así empezamos a crecer. Pasamos de ser tres socios a ocho, saltamos del monoambiente a una casa y eso nos llevó a volver a hacer lo que nos gustaba que era tele y radio. Con la pandemia la agencia tuvo un revolcón y nos pegó fuerte, sobre todo en miedo y estrés de parte de nuestros clientes. Trabajar remoto fue una papa y hoy la agencia tiene un esquema nuevo. Volvimos a un estado horizontal como cuando trabajábamos al principio y mejoró el flujo de trabajo. Las agencias están acostumbradas a trabajar en equipo y para muchas fue difícil dar el salto, nosotros estábamos preparados. La base nuestra está en captar nuevos talentos que después en dos años se van a otra agencia más grande. Las generaciones más jóvenes no son peores ni mejores, son distintos y hay que saberlos captar. Nuestro equipo es estable de ocho personas pero según los proyectos interactuamos con profesionales más senior. En la interna desde hace tiempo trabajamos con Trello, que es una herramienta genial para teletrabajar. Es como un pizarrón gigante donde se van abriendo tarjetas de trabajo. Ahora que estamos todos juntos ponemos todo el trabajo de la agencia en el tablero. Tenemos un ranking de clientes para saber a qué darle prioridad. Cada tablero es una discusión, no hay cadena de emails, podés poner deadlines con alarmas.
Nosotros no somos una agencia online ni offline, las líneas las mandamos al demonio porque la comunicación tiene que ser en función de objetivos. En cuanto a la presencia en todos los medios, sí está genial el omnichannel pero no alcanza con tener una estrategia sólida, también hay que poder costearla. No podes poner 100 dólares en cada medio y esperar a que te vaya bien. Los algoritmos cada vez muestran menos publicidad orgánica. El medio es cada vez más competitivo porque es un tipo de publicidad que está creciendo constantemente. Por eso me parece interesante ver a la publicidad como un todo”.
Gracias a quienes nos acompañan: