Locura de sexo en la ciudad (by Laura Meléndez).

Un fin de semana en Buenos Aires siempre rinde. A pesar de no haber ido al teatro, una parada obligatoria fue el cine. ¿Qué ver? Obviamente Sex and the City, la película en la que Sarah Jessica finalmente... no te voy a contar el final, por supu. Pero sí hubo algunas cosas de la peli que me llamaron la atención y tienen que ver con el manejo de marcas. Sarah Jessica (o mejor dicho Carrie), anda todo el tiempo con su laptop. ¿Marca? MacBook, of course... pero en un momento dramático del filme, y ante la desesperación porque no encuentra su rosado teléfono, Samantha le alcanza un iPhone y Carrie lo mira y le dice: "No lo entiendo, es muy complicado para mí" (o algo así). Otras dos marcas visiblemente "coladas" en la peli son Mercedes Benz (es la marca del auto de "Big" y la camioneta de Samantha que es millonaria y vive en Los Ángeles) y Louis Vuitton, que aparece cuando Carrie le pregunta a su futura asistente durante su entrevista laboral de dónde había sacado su cartera. Obviamente, la futura asistente le dice que la alquiló "hasta el martes". No es de extrañar entonces, que esta tendencia de rentar accesorios de marca carísimos se ponga de moda por estas latitudes. Estaremos alerta para pasarte los piques...

El auge de la ropa vintage de lujo (dónde comprar piezas de Dior, Paco Rabanne, Kenzo, Yves Saint Laurent y otros diseñadores internacionales)

(Por Rosina De Armas) En Ciudad Vieja, las tiendas Ceibo y Reconquista se unieron para ofrecer ropa que destaca por su confección y la nobleza de los materiales. Los dueños de estos locales, Hernán Clavijo y María Pía Galvalisi, evalúan la posibilidad de abrir un nuevo espacio ante la receptividad de los clientes y el aumento de las ventas.